Aquí se sirve el mejor bocata de calamares de Vigo: el truco para probarlo sin hacer cola

El bocadillo de calamares se ha convertido en todo un clásico de los bares, una versión primigenia de la comida rápida pero con un producto del mar y que en Galicia se consume en grandes cantidades, ya sea servido como tapa, plato único o entre pan.

Tres elementos hay que tener en cuenta para designar como "el mejor" de estos bocadillos: el producto, que debe ser calamar, y no pota, de sabor y textura menos delicados; el rebozado, que tiene que ser crujiente y adherirse al calamar; y el pan, por supuesto, que debe dejar un bocado que no empalague la boca y disfrutar del producto.

Es cierto que en Vigo hay muchos bocadillos de calamares de gran calidad y sabor, pero quizás el mejor le corresponda a un local clásico de la ciudad y que lo lleva sirviendo como una de sus especialidades desde hace décadas.

Se trata del bocadillo de calamares del Rin Ran, la bocatería de referencia en Churruca. Aquí se puede disfrutar en tres versiones: solo los calamares, por 5,80 euros; completo, por 6,80 euros, que vienen acompañados de queso, pan restregado con tomate, ajo, pimienta blanca, aceite, lechuga, tomate y mayonesa; o con ali-oli y cebolla frita, por 6 euros. Además, la ración se puede probar por 10 euros.

Como lugar clásico para las cenas económicas, especialmente los fines de semana, cuando la noche se prevé larga, suele llenarse y para conseguir sitio en una mesa, es necesario esperar un rato, que a veces se puede hacer largo. Por ello, un truco que restará tiempo de espera para probarlo es, como en otros bares, pedirlo en la barra; no sólo no tendrás que esperar a sentarte en una mesa cuando el local esté masificado, sino que además tendrás cerca a los camareros para poder repetir, pedir tu bebida o pagar.

Otra posibilidad, por supuesto, es la opción de llevarlo para tomar fuera o, sin moverte de casa, optar por que te lo lleven a domicilio.