Publicada

La Cuchillería nace como la apuesta personal de tres hosteleros locales que querían devolver a Vigo un pedacito de la cocina más auténtica de Galicia. Este espacio gastronómico, enmarcado en las entrañas de la ciudad Olívica, apunta a convertirse en todo un referente del buen comer, con una propuesta que ofrece un auténtico viaje a las raíces y los orígenes de Galicia a través de la cocina. "Es una idea muy madurada, al final nos decantamos por esta opción porque creemos que es la más bonita, la que más representa la tierra y la que más nos representa a nosotros", explica Manuel Garrido, propietario del Restaurante Valdevez y cofundador del espacio junto con Javier Brea (Cosmos) y Jesús Vaquero (Restaurante Cíes). "Nos juntamos ―dice Manuel― para abrir un espacio de carácter local". 

Así surgió el germen de esta alta taberna gallega, que acaba de abrir sus puertas en plena Praza da Princesa, con vistas directas y privilegiadas a la emblemática Porta do Sol. "Esto es una taberna trasladada a un concepto un poco más moderno de lo que eran antiguamente, pero con producto de aquí", aclara su propietario. Y es que los fogones de La Cuchillería se nutren ―siempre que es posible― de las mejores materias primas de proximidad, garantizando de esta manera un compromiso con la autenticidad y la alta calidad que tanto distingue a la gastronomía tradicional de la región. 

El nombre de La Cuchillería tampoco es fruto del azar. El designio representa una especie de tributo al pasado laboral de este icónico rincón de la Praza da Princesa. "La cuchillería fue mítica en la ciudad (...) el nombre es también un homenaje a esa gente que estuvo aquí más de medio siglo". Hoy, en el interior de este renovado espacio gastronómico, la luz se filtra a través de las amplias cristaleras, dejando entrever un escenario que invita al comensal a viajar en el tiempo. Un ambiente único que crea el marco perfecto para centrarse en lo verdaderamente importante: la comida. 

El nuevo templo vigués del buen comer

La Cuchillería, alta taberna gallega Cedida Vigo

La carta de La Cuchillería esconde ciertos tintes nostálgicos que transportan al comensal a una época dorada para la gastronomía gallega. El regreso a los orígenes y los sabores tradicionales, reinterpretados con un sútil toque de vanguardia, se hace evidente desde la primera página de su recetario, en un apartado dedicado a los platos "para compartir" que, seguro, conquistará el paladar de los más gourmets, sibaritas o amantes de la cocina enxebre. Aquí destacan clásicos de las tabernas gallegas de siempre, tales como la empanada de lacón (grelos, chorizo y tellita) o de millo de berberecho; las croquetas de cocido y cecina; la oreja y lacón con pimentón y arbequina; unas zamburiñas a la plancha y hasta un apetecible raxo con huevos y patatas fritas. Un amplio abanico de opciones que invita al comensal a saborear lo mejor de las raíces culinarias de Galicia. 

"Nosotros queremos que esto sea una taberna al uso, no un restaurante rígido, ni una cervecería o vinoteca", aclara Manuel. "El cliente va a poder venir aquí a tomarse un vino o una cerveza con una tapita de algo, desde un salpicón de marisco hasta una una oreja con lacón por 10, 12 o 15 euros por cabeza. Pero también va a poder disfrutar de una centolla, unas almejas, un bovagante azul o cualquier otro producto de la tierra (...) siempre, como decía, desde un punto de vista más desenfadado que el de un restaurante". "Por ahora estamos afianzándonos en nuestra carta, pero la intención es tener platos típicos de Galicia durante todo el año. Ahora en invierno, más platos de cuchara, y en verano, opciones más frescas, con verduras y productos de proximidad en la medida de lo posible", avanza Garrido. 

Lo cierto es que el producto local y de temporada juega un papel fundamental en la propuesta gastronómica de La Cuchillería. De hecho, en esta alta taberna gallega se celebra la pureza del producto, evitando transformaciones excesivas que puedan restar protagonismo a su calidad natural. Esto sucede sobre todo en el caso de los pescados, las carnes y los mariscos, auténticas joyas de la corona de esta cocina tradicional. Platos como el tomahawk acompañado de patatas y huevos fritos, un sabroso arroz con chocos, las navajas de Cíes, el mejillón de Moaña o las centollas y nécoras de la ría son sólo algunos de los manjares que convierten a este espacio en un verdadero templo del buen comer en Vigo. 

En La Cuchillería, la conexión entre la cocina y la bodega resulta esencial, creando una armonía perfecta que acompaña a cada pase del menú diario. La cuidada selección de vinos ofrece opciones de maridaje tanto por copa como en botella, adaptándose a todos los gustos y paladares: "Hemos hecho una selección de unas 35 referencias, dando presencia a las dos principales Denominaciones de Origen de España: Rioja y Ribera del Duero". Además, también el vino de la tierra ocupa un lugar destacado en esta taberna viguesa, con una buena variedad de mencías, ribeiros, albariños y godellos que ponen el broche de oro a la experiencia gastronómica de La Cuchillería.