En el corazón de Virginia Occidental, Estados Unidos, se encuentra Thurmond, un diminuto pueblo que, según el censo de 2020, cuenta con apenas cinco residentes. A pesar de su tamaño reducido, esta localidad ha logrado mantener su estatus como municipio y conserva un legado histórico que lo convierte en un destino fascinante dentro del estado.
Ubicado a orillas del río New, esta aldea fue en su día un centro ferroviario y minero de gran importancia. Durante principios del siglo XX, su economía dependía principalmente de la extracción de carbón y el transporte de mercancías a través del ferrocarril, convirtiéndolo en un punto clave para la región. En su mejor época, la localidad contaba con bancos, hoteles y una estación ferroviaria que llegó a ser una de las más transitadas de Virginia Occidental.
Sin embargo, con la caída de la industria minera y el descenso del tráfico ferroviario, experimentó un declive que llevó a la migración masiva de sus habitantes. Lo que en su momento fue un bullicioso centro de comercio y transporte, hoy es prácticamente un pueblo fantasma con solo cinco residentes.
Un tesoro histórico
A pesar de la despoblación, el pueblo conserva gran parte de su arquitectura original, lo que le ha valido el reconocimiento como sitio histórico. Sus calles desiertas, sus edificios bien conservados y su icónica estación de tren permiten a los visitantes viajar en el tiempo y experimentar la atmósfera de los pueblos ferroviarios de antaño.
Uno de los principales atractivos de la localidad es la estación de tren de Thurmond, que ha sido restaurada y convertida en un centro de visitantes del Parque Nacional New River Gorge. Este parque, famoso por su espectacular paisaje montañoso y su icónico puente sobre el río New, atrae a excursionistas, escaladores y amantes de la naturaleza que encuentran en Thurmond un complemento perfecto para su visita.
El encanto nostálgico de Thurmond ha llamado la atención de la industria cinematográfica. Sus edificios abandonados y su ambiente de pueblo ferroviario han sido utilizados en varias películas y documentales que buscan capturar la esencia de la América de principios del siglo XX.
Además, su ubicación dentro del Parque Nacional New River Gorge lo convierte en un destino atractivo para quienes disfrutan de actividades al aire libre como senderismo, kayak y escalada. La combinación de historia y naturaleza ha hecho que Thurmond no solo sea un sitio de interés para historiadores y cineastas, sino también para aventureros y fotógrafos que buscan escenarios únicos en Estados Unidos.
El futuro de un pueblo casi deshabitado
A pesar de contar con solo cinco habitantes, sigue recibiendo visitantes interesados en conocer su historia y recorrer sus calles casi intactas. Aunque su población ha disminuido drásticamente, el pueblo se ha convertido en un símbolo de la historia ferroviaria y minera de Estados Unidos.
El Servicio de Parques Nacionales trabaja en la conservación de los edificios históricos, asegurando que el legado de Thurmond no desaparezca. Su singularidad como uno de los pueblos más pequeños del país y su entorno natural hacen que, a pesar de su baja población, siga siendo un punto de referencia en el mapa de Virginia Occidental y un testimonio vivo de la historia industrial del país.