Valencia

La ciudad de Valencia nace en el año 138 a.C. El cónsul Décimo Junio Bruto recompensó a sus soldados, veteranos de las guerras lusitanas contra Viriato, con unas tierras fértiles junto al Mare Nostrum, que recibirían el nombre de Valentia.

Desde entonces, han habido tantos sucesos trascendentales como cambio de épocas y reinados. Pero sin duda, la última catástrofe que pareció poder acabar con la ciudad y que marcó el siglo XX fue la Gran riada de 1957.

Según un estudio de la Universidad Politécnica de Valencia, hubo precipitaciones que llegaron a los 100 litros por cada metro cuadrado en 24 horas, lo que provocó la crecida y el posterior desbordamiento del cauce del río Turia. 

[Una joven denuncia una violación en manada frente a un cuartel de la Guardia Civil de Valencia]

Las fuertes lluvias causaron una primera onda de crecida que llegó a Valencia el día 14 de octubre con un caudal máximo de 2700 metros cúbicos por segundo. La segunda onda alcanzó un caudal máximo de 3700 m3/s.

Estos dos desbordamientos dejaron la ciudad sumida en la catástrofe, con 81 víctimas, miles de damnificados y muchos daños materiales. Este acontecimiento pudo asemejarse a la posible desaparición de Valencia. Pero, ¿cuál será su fin?

Aunque el futuro sea incierto, la única capaz de crear un posible escenario es la inteligencia artificial. La redacción de EL ESPAÑOL ha pedido a ChatGPT que elabore una narración ficticia sobre el final (con fechas y causas) de la ciudad de Valencia. Este ha sido el resultado:

El fin de Valencia: 2067

Quedan 44 años para que la ciudad de Valencia llegue a su fin. Desaparecerá en el año 2067, según ChatGPT.

La IA empieza su narración de la siguiente manera: "En el año 2067, Valencia, la bella ciudad a orillas del Mediterráneo, experimentó un trágico y sorprendente final que dejó una profunda impresión en la historia de España".

Desde 2025 hasta 2035 las noticias son buenas. La capital del Turia experimenta un auge tecnológico y económico. Se convierte en el centro tecnológico de Europa, atrayendo a empresas de alta tecnología y emprendedores de todo el mundo.

La economía de la ciudad prospera, con un crecimiento constante en el sector de la biotecnología, la inteligencia artificial y las energías renovables. La población también crece rápidamente al mudarse jóvenes talentos de todo el mundo en busca de oportunidades.

Pero es en el 2040 hasta el 2050 cuando ChatGPT visiona lo peor: crisis ambiental y cambio climático. "Las olas de calor cada vez más intensas y prolongadas comienzan a afectar la salud de la población y la escasez de agua se convierte en un problema grave", relata la IA.

La Ciudad de las Artes y las Ciencias inundada, según la IA. Generador Imágenes Bing

Añade que a pesar de los esfuerzos por implementar tecnologías sostenibles, la ciudad luchó por adaptarse a un entorno en constante deterioro.

Llega 2060 y hasta 2065 "la escasez de agua empeora en Valencia; mientras que las sequías prolongadas hacen que los cultivos sean insostenibles". Continúa en su historia ficticia con que la hambruna se extiende por la región y la población se ve forzada a depender de la ayuda humanitaria.

Es cuando la desesperación y la inseguridad alimentaria llevan a disturbios y saqueos en las calles. LLega 2066 y 2067 y la revuelta estalla a medida que la situación empeora.

"Grupos de la sociedad civil y facciones descontentas con el gobierno se enfrentan en una lucha por el control de los recursos restantes", mientras que la ciudad se sume en el caos, con combates y disturbios que provocan la devastación de gran parte de las infraestructuras.

El 3 de noviembre de 2067, Valencia anuncia oficialmente el estado de emergencia y solicita la asistencia del gobierno central. "Las fuerzas armadas se desplegaron para restaurar el orden, pero la situación ya estaba fuera de control. La ciudad quedó dividida en zonas de conflicto y la vida cotidiana se volvió insostenible", prosigue ChatGPT.

El 12 de diciembre del mismo año, el gobierno central anuncia la evacuación completa de Valencia. La población restante fue trasladada a refugios temporales en otras ciudades.

"La ciudad de Valencia, una vez vibrante y llena de vida, quedó en ruinas, con sus calles desiertas y edificios abandonados", concluye.

La Inteligencia Artificial centra su discurso en el medio ambiente y los desafíos de cara a los próximos años, con "la importancia de abordar el cambio climático y la necesidad de prepararse para los retos ambientales que enfrenta la humanidad".

El final de Valencia, aunque pueda parecer surrealista, recuerda la fragilidad de "nuestras sociedades en un planeta en constante cambio", por lo que ChatGPT aboga por ser conscientes de los efectos irreversibles que pueda suponer el cambio climático.