Valencia

El presidente de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón, ha iniciado una ofensiva para reducir el número de subvenciones a dedo en la autonomía. Los primeros efectos ya pueden apreciarse en consellerias como la de Innovación, Industria, Comercio y Turismo, dirigida por Nuria Montes, que las ha reducido un 30% en su presupuesto.

En concreto, según consta en las cuentas de esta área para 2024, pasará de tener 156 líneas nominativas de financiación a un total de 108. Las 48 restantes se convertirán en líneas de concurrencia competitiva, que obligan a escoger al mejor aspirante y reducen la capacidad de elegir del político.

Las líneas a dedo se reducen en entidades públicas como la Agencia Valenciana de Innovación, que pasa de seis a cero; o en el Instituto Valenciano de Competitividad Empresarial, que pasa de 12 a 8. Pero el grueso lo concentran los programas de Turismo, que pasan de 89 a 62.

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El nuevo Gobierno valenciano apuesta por "implantar al máximo la concurrencia competitiva", según precisan fuentes de la Conselleria de Innovación. El criterio que siguen es el manifestado por la Sindicatura de Comptes en 2021. En dicho ejercicio fiscalizó las subvenciones concedidas para paliar los efectos de la Covid-19, y concluyó que se estaba haciendo un abuso de la subvención a dedo en la Generalitat.

"La situación de emergencia ha dado lugar a la sustitución del procedimiento ordinario, la concurrencia competitiva, por la concesión directa como procedimiento generalizado para otorgar las subvenciones Covid-19", lamentó la Sindicatura, y advirtió de que con esta práctica "se excepcionan los principios de publicidad y concurrencia".

No es el único frente de Mazón contra la discrecionalidad en la Administración valenciana. Su Ejecutivo también se ha propuesto reducir la contratación a dedo mediante contratos menores, los que ascienden a un máximo de 15.000 euros sin IVA.

Este jueves, el presidente autonómico anunció el recuento de los contratos menores efectuados durante los últimos cinco años del presidente Ximo Puig. Ascienden, según cifró, a más de 800 millones de euros en adjudicaciones a dedo.

Eliminará sociedades

Carlos Mazón realizó este anuncio durante su intervención en el Forum Europa Tribuna Mediterránea, donde advirtió de que eliminará "sociedades y fundaciones" impulsadas por su antecesor. "Están duplicando actividad e incrementando la administración", dijo al respecto, sin precisar a cuáles se refiere. Sí dijo que estos ajustes llegarán "en los primeros meses de 2024".

"La optimización no ha hecho más que comenzar", indicó al ser preguntado sobre si se ha guardado ajustes en 'grasa política' para próximos ejercicios. "Me los he guardado todos", advirtió. Su presupuesto es expansivo. El gasto crecerá un 4,5%. "No nos ha dado tiempo", se excusó.

El montante total que prevé gastar la administración autonómica pasa de los 28.438 millones de euros de 2023, que ya era la cifra récord en la autonomía, a los 29.732 para el próximo 2024.

Las primeras cuentas de Mazón, en consecuencia, se convierten en las mayores de la historia de la Generalitat Valenciana. Y ello se produce, según precisó la consellera de Hacienda y portavoz, Ruth Merino, por el notable incremento previsto -del 16%- en las transferencias del Estado.

El presidente defendió que los Presupuestos de la Generalitat de 2024 "dicen la verdad" frente a los presupuestos de los gobiernos del Botànic en los que las inversiones "no eran realmente inversiones".

Dejaron, según cifró, 1.350 millones de intereses de la deuda con los que se podrían construir 170 colegios, 135 residencias, 5.400 plazas más, 120 centros de salud o 115 institutos. También "la cuarta conselleria con mayor presupuesto, la Conselleria de la deuda", ironizó sobre el coste que supone hacer frente a los créditos pendientes.