El Gobierno valenciano perdonará las faltas de ortografía en las materias no lingüísticas a los estudiantes diagnosticados de dislexia en las pruebas de acceso a la Universidad.

Así lo anunció este martes el conseller de Educación, Universidades y Empleo, José Antonio Rovira, quien explicó que en la corrección no se tendrán en cuentan los errores de ortografía natural, como la omisión de letras (por ejemplo, escribir Los Reyes Católico en lugar de Católicos).

Tampoco penalizarán la sustitución de unos grafemas por otros con sonoridad parecida (por ejemplo, empellado por empeñado), las transposiciones de grafemas (nobelza por nobleza) o la mezcla de minúsculas y mayúsculas.

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Tampoco restarán en la puntuación las consideradas faltas arbitrarias, es decir, el uso de la h, b/v, g/j, ll/y y x/s).

Además, en las asignaturas de lengua, estos alumnos solo verán penalizadas las faltas de ortografía regladas hasta dos tercios de la puntuación total y como máximo 3 puntos. Entran en este grupo las reglas de uso de r/rr, m/n, c/qu, z/c, g/gu, güe/güi o -z/-d.

Entrada en vigor

Estas novedades se aplicarán ya en la EBAU de este curso y el Ejecutivo autonómico está trabajando, según anunció el conseller, para que estas adaptaciones se apliquen también durante los dos años de Bachillerato.

Esta medida se ha tomado tras las conclusiones de un informe técnico llevado a cabo por la Unidad Especializada de Orientación de Dénia, que es especialista en trastornos en déficit de atención y otras dificultades específicas de aprendizaje, según explicó el departamento que dirige Rovira.

Estos estudiantes cuentan con otras adaptaciones en la educación valenciana. Disponen de un 25% más de tiempo para realizar los exámenes, cuentan con la posibilidad de que se les lean las preguntas en voz alta para interpretar mejor el enunciado y estar en un aula de apoyo si lo desean.

Además, las pruebas de la EBAU cuentan con diferentes criterios de adaptación para los alumnos con necesidades específicas de apoyo educativo como es la discapacidad auditiva, visual o motriz, entre otras.

Rovira destacó que esta novedad en los criterios de evaluación para el alumnado con necesidades educativas específicas "significa garantizar la equidad en la educación, ayudando a que los estudiantes con dislexia accedan a estudios universitarios".

Por su parte, la presidenta de Trenca-dis (asociación comprometida con la dislexia y otras Dificultades Específicas de Aprendizaje), Concha Barceló, consideró que estos nuevos criterios son "un gran paso".

"La dislexia es un trastorno del aprendizaje que afecta a alrededor de un 10% de la población", aseguró. En este sentido, explicó que "en un aula podemos encontrar a uno o dos alumnos con dislexia".