"Dormíamos encima de una falla": investigan si el edificio incendiado en Valencia tenía elementos combustibles
Los expertos piden prudencia hasta conocer las causas del origen del fuego, pero admiten que lla fachada podría tener "componentes plásticos".
24 febrero, 2024 03:32Las personas afectadas por el incendio en dos edificios de la zona de Campanar de Valencia inician ahora un largo recorrido administrativo y judicial para reclamar por los daños que han sufrido en sus viviendas y conocer el origen del dramático suceso.
El edificio se da absolutamente por perdido. La Policía Nacional investiga las causas del incendio, pero parece que el producto con el que se revistió la fachada podría haber actuado de acelerante.
Los agentes de la Policía Científica y los bomberos han accedido al edificio la mañana de este viernes, tras comprobar que la estructura era segura. Los investigadores están tomando muestras para conocer el punto exacto en el que se originó, al parecer en la séptima planta, y si los materiales de la fachada eran inflamables.
Las llamas se propagaron rápidamente y muchos todavía se preguntan cómo el fuego logró devorar en horas el complejo residencial. En solo 10 minutos pasó de una planta a otra.
De momento, y hasta que finalicen las diligencias, todos los indicios apuntan al fuerte viento y al material de poliuretano que recubría la fachada ventilada del inmueble como los dos factores que provocaron que las llamas cabaran con el edificio en una hora.
"El producto concreto utilizado en el edificio de Campanar puede tener algún material, de dentro del composite del aislante, que fuera altamente combustible, tal y como se ha propagado el incendio. Pero hay que esperar al análisis de los técnicos para conocer lo que ha ocurrido realmente", aseguró en declaraciones a EL ESPAÑOL el decano del Colegio Oficial de la Arquitectura Técnica de Valencia (COAT Valencia), Luis Sendra.
El bloque comenzó a promocionarse en 2006 y se terminó en 2008, en plena burbuja inmobiliaria. Era un barrio nuevo, Nou Campanar, que creció junto al antiguo Campanar y el Jardín del Turia sobre unos terrenos que antes acogían alquerías y huerta.
El edificio se encuentra en la calle Poeta Rafael Alberti, 2. Cuenta con 137 viviendas, 2 cuerpos de 12 y 15 plantas, 3 sótanos. El proyecto lo desarrolló la promotora Fbex, del empresario Juan Parada, que entró en concurso de acreedores dos años después de su finalización, en 2010.
Al parecer, está revestido de panel tipo composite, de aluminio y materiales termoplásticos.
"Es un edificio que tiene una fachada ventilada, es decir, que tiene una cámara de aire dentro de lo que sería el cerramiento habitual y el exterior, que hace bonito con placas de aluminio", precisó Sendra.
Por ello, cree que "en un momento dado, las llamas pueden subir por ese espacio y hacer un efecto chimenea, que es lo que probablemente ha provocado la rapidez con la que se han transmitido las llamas".
Acabado habitual
Se trata de un tipo de acabado habitual en la época de construcción de este edificio. Se revestían de poliuretano u otros materiales como lanas, en los aislamientos de los edificios.
Por encima, se colocaban unas placas decorativas, que en el caso del edificio siniestrado son de aluminio.
Sobre el poliuretano, Sendra manifestó que aún no sabe con certeza si la causa está en este material o en otro, pero que "se utilizó en aquella época, no de manera habitual porque todos los edificios no tenían cámara de aire".
Según destacó el experto, la normativa a partir de 2011 establece que los productos que se colocan en la fachada deben tener unas características en cuanto a su comportamiento con el fuego. Pero, por ejemplo, indicó que al poliuretano se le pueden aplicar tratamientos adicionales que "impidan que sea tan combustible".
El edificio se inició en febrero de 2006, con anterioridad al Código Técnico de la Edificación (CTE), que es la normativa actual que rige nuestras edificaciones.
A raíz de un incendio registrado en Londres, se efectuó una modificación en el CTE en 2019 que aumentó las exigencias respecto a los materiales y las fachadas ventiladas como esta, exigencias que se incrementan según la altura del edificio.
Actualmente, en edificios de esta altura, las cámaras ventiladas se deben interrumpir en continuidad, por ejemplo, de forma que queden segmentadas y no sean continuas. Esta norma, no obstante, también es posterior a la construcción de este edificio.
Esta misma promotora levantó otro edificio de similares características muy cerca del de Campanar, en Mislata, un municipio pegado a Valencia. Pero los expertos hacen un llamamiento a la calma.
"Cada edificio puede ser un mundo. Hay que atender al libro del edificio, el de cada uno, y ver sus características concretas. Hay que tener muy en cuenta también que el escenario ha sido una tormenta perfecta, un fuerte incendio que se propaga rápidamente por el fuerte viento", dijo Sendra.
Los vecinos afectados por el incendio piden responsabilidades. "Lo que nos ha pasado no tiene nombre, dormíamos encima de una falla. Este mismo constructor hizo uno igual en Mislata. Que tomen medidas porque no me gustaría ver otra cosa así la próxima semana", manifestó a este periódico Lauren Gil, padre de una de las propietarias.
"Componentes plásticos"
La perito y experta en incendios Esther Puchades explicó este viernes en un comunicado que "todos los indicios apuntaban al poliuretano como el causante de la voracidad de las llamas y el color del humo, porque ya lo había presenciado en otras situaciones similares en incendios en polígonos industriales".
Se da la circunstancia de que Puchades conoce el edificio por unas peritaciones a unas instalaciones.
"No podemos asegurar que sea ningún material en concreto hasta que no concluya la investigación. En base a mi experiencia, lo que está claro es que alguno de los materiales de la fachada tiene componentes plásticos, y se inflamó rápidamente".