La controversia surgida a partir de la traducción de los Evangelios al valenciano continúa.
El vicepresidente de Vox y conseller de Cultura y Deporte, Vicente Barrera, aseguró que entiende "perfectamente" las críticas de dirigentes de la Real Academia de Cultura Valenciana (RACV) al arzobispo de Valencia, Enrique Benavent, e insistió en que en la Comunitat Valenciana "tenemos nuestro propio idioma, que es el valenciano y nunca el catalán".
De esta manera, el partido de Santiago Abascal entra de lleno en un tema del que hace bandera: el no reconocimiento del valenciano normativo y de la institución recogida en el Estatut que vela por su cumplimiento, la Acadèmia Valenciana de la Llengua (AVL).
[Acusan al arzobispo de Valencia de "catalanizar" a la Virgen de los Desamparados y los Evangelios]
La polémica surgió a partir de que la RACV, una entidad centenaria que cuestiona la gramática oficial valenciana, reclamara el jueves en un comunicado que la Iglesia valenciana "rectifique su nueva política lingüística".
Los miembros de esta institución acusaron al arzobispo de Valencia, monseñor Enrique Benavent, de saltarse "su compromiso de obtener el consenso de los obispos de la Archidiócesis al haber remitido una versión de los Evangelios catalanizada para leer en las misas".
Como ejemplo de esta "catanalización", la RACV advirtió que "han convertido a la Mare dels Desamparats, en la catalana Mare dels Desemparats".
En declaraciones a los medios este viernes, el vicepresidente valenciano y conseller de Cultura señaló que él es "católico, apostólico y practicante" y que, por eso mismo, tiene "un gran respeto" al arzobispo Benavent.
Sin embargo, reconoció "entender perfectamente" las manifestaciones de la RACV. De hecho, anunció que se unía a "las peticiones".
Su objetivo, que "se nos reconozca por parte de todas las instancias y todos los estamentos que tenemos nuestro propio idioma, que es el valenciano y nunca el catalán".
Sobre este último, apuntó que es "un idioma muy respetado, pero no el propio de nuestra Comunitat".
Misas en valenciano
El pasado mes de febrero, el Arzobispado publicó por primera vez en valenciano los textos de los evangelios, una iniciativa que busca "transmitir la fe y la palabra de Dios" en la lengua cooficial.
Se han distribuido 5.000 ejemplares entre parroquias, colegios católicos y fieles.
La publicación surgió a raíz de "la voluntad de los espectadores de la misa en valenciano que se retransmite cada domingo en À Punt -la televisión pública valenciana- de tener los textos para poder seguir" la celebración.
También va dirigida a los miembros de las parroquias que hablan en valenciano y que "puedan rezar cada día en su lengua", dijo el delegado diocesano de Liturgia, el sacerdote Edgar Esteve, en declaraciones a Europa Press.
"Existen muchos instrumentos para rezar en castellano y el objetivo era transmitir la fe y la manera más efectiva para hacerlo era a través del Evangelio: evangelizar con todos los instrumentos que tenemos y la lengua es uno", señaló entonces el sacerdote.
Los textos están editados según las normas de la Acadèmia Valenciana de la Llengua (AVL) y la gramática oficial que se enseña en los colegios.
Pero la RACV, como Vox y ciertos sectores del PP, defiende que el valenciano es una lengua singular y distinta del catalán y no reconoce las normas.
Audiencia privada
La entidad señaló que el pasado mes de marzo una representación de la RACV, con el decano, José Luis Manglano al frente, asistió a la audiencia del nuevo arzobispo con el fin de "ofrecerle sus respetos y ponerse a disposición del nuevo responsable de la Archidiócesis valenciana".
La audiencia transcurrió en un clima de amabilidad y respeto, subrayó la entidad, y el representante de la Real Academia obsequió al arzobispo con un ejemplar del catecismo y otro de la Santa Misa redactados en lo que esta entidad denomina "auténtico valenciano".
Unos documentos que "habían recibido el nihil obstat tanto de la Conferencia Episcopal como del Vaticano".
En este sentido, se le informó de que "había sido utilizado en determinadas ocasiones por su antecesor, el cardenal Antonio Cañizares".
Como ejemplo de esta "catalanización", la RACV recuerda que "han convertido a la Mare dels Desamparats, en la catalana Mare dels Desemparats, sustituyendo la A del valenciano Ampar, por la E del catalán Emper".
"Ante esta situación, la RACV desea manifestar su más profundo rechazo a este tipo de políticas lingüísticas que se llevan desde el Palacio Arzobispal y recuerda que, hasta ahora, con el cardenal Cañizares, la Iglesia valenciana ha vivido en paz y tranquila", subrayaron.
Mantienen que siempre "se ha podido expresar en las dos lenguas que reconoce nuestro Estatuto de Autonomía", el castellano y el valenciano, este último y a juicio de la entidad, "auténtico".