Eduardo Zaplana ha defendido en el juicio que se sigue contra él y otros 14 acusados por el caso Erial que nunca ha tenido dinero oculto en el extranjero y se ha desvinculado de las adjudicaciones de concursos públicos cuando era presidente del Gobierno valenciano.
"No me dedicaba a eso ni me dediqué jamás", ha defendido el exministro y expresidente de la Generalitat en la vista que se ha retomado este martes en la Audiencia de Valencia, al tiempo que ha reiterado que no tiene cuentas en paraísos fiscales.
"No he tenido dinero fuera de España y lo mantengo", ha respondido a preguntas de la Fiscalía Anticorrupción.
La Sección Cuarta de la Audiencia de Valencia juzga desde hace dos semanas a Zaplana por el caso Erial, procedimiento que investigó el supuesto cobro de más de 10 millones de euros en comisiones derivadas de concesiones de ITV y parques eólicos de la Comunitat Valenciana.
Los investigadores hallaron en dos cuentas en Suiza más de 6 millones de euros que uno de los testigos del caso y supuesto testaferro, el uruguayo Fernando Belhot, atribuyó al patrimonio del exministro
Durante la vista, Zaplana ha manifestado que "nunca" propuso a nadie que le gestionara dinero oculto en el extranjero porque no lo tenía.
"Jamás, porque no he tenido dinero. No puedo pedir ninguna gestión para lo que no he tenido (...) He dicho siempre que no he tenido nunca dinero fuera de España".
Sobre las adjudicaciones de contratos públicos cuando era presidente de la Generalitat, el exministro ha manifestado que no encargaba esto a nadie, sino que se creaba una comisión y se aprobaba todo por el Consell.
Zaplana se enfrenta a 19 años de prisión por estos hechos y su defensa pide la absolución.
Aunque la investigación policial se inició en 2015, las primeras detenciones se produjeron en mayo de 2018 y fruto de las mismas Zaplana estuvo en prisión hasta el 7 de febrero de 2019.
No obstante, permaneció ingresado en La Fe por una enfermedad oncológica desde el 18 de diciembre de 2018 al 11 de febrero de 2019.
Relación con Belhot
Zaplana ha respondido a todas las preguntas de la Fiscalía Anticorrupción y el interrogatorio se ha prolongado durante tres horas y media.
Su abogado ha renunciado a seguir planteando cuestiones al considerar que su declaración fue minuciosa y profunda.
Respecto a Fernando Belhot, cuyo testimonio ha sido clave para procesar a Zaplana, el exdirigente del PP ha indicado que era una persona muy conocida en Madrid y entre "los empresarios".
En este sentido, ha aclarado que ha tenido una relación "amplia" con él.
"En algún momento me ha propuesto varias operaciones económicas que nunca hemos concretado", ha añadido. Pero a continuación ha matizado que "nunca ha gestionado patrimonio mío".
Sobre el exconseller Juan Cotino, ya fallecido, ha asegurado que lo conocía "bastante", pero "nunca" hizo ningún tipo de negocio con él.
Los sobrinos de Cotino también están siendo juzgados por estos hechos y su defensa renunció a plantear cuestiones previas tras llegar a un posible acuerdo para admitir los hechos a cambio de una rebaja en la petición de condena.
Cruceros y viviendas
Por otro lado, ha reconocido que le invitaron a dos cruceros en 2009 y 2010, valorados en 234.000 euros, y ha dicho que la idea partió de una persona con la que no había tenido relación desde la Administración "jamás".
"En otras ocasiones también he navegado con personas importantes y no han dejado el barco y no ha sido motivo de su curiosidad", ha añadido.
Por último, preguntado por una vivienda que adquirió su amigo y supuesto testaferro, Joaquín Barceló, en Madrid y en la que residió un tiempo, ha señalado que no se encargó de la reforma y que no subía por el montacargas para ocultar nada.
"No había ningún nivel de ocultación", ha añadido. Zaplana ha detallado que ocupó la vivienda "desde los meses enero-febrero del año 2010 hasta el mes de julio de 2011".
"Dejo de vivir en mi vivienda de la Castellana en 2006 por motivos personales que mi abogado ha explicado en el escrito de defensa. Vivo de alquiler y, cuando compra la vivienda Barceló, me ofrece irme allí y estoy encantado", ha respondido.
La Fiscalía Anticorrupción cree que en realidad esa vivienda era de Zaplana y que la adquirió a nombre de su amigo Barceló para ocultar su verdadero patrimonio ene l extranjero.
El juicio se retoma este miércoles con la declaración de Barceló, otro de los acusados que habría llegado a un acuerdo con la Fiscalía para tirar de la manta.