Primer encuentro bilateral entre el presidente de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón (PP), y el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page (PSOE).
La convocatoria oficial, la firma este miércoles en Requena (Valencia) de un convenio para garantizar la atención sanitaria en las zonas limítrofes, sin embargo, el encuentro sirvió también para avanzar en otras materias de interés para ambas autonomías como la financiación autonómica o el agua. En esta última, sin embargo, ambos dirigentes mostraron posiciones más lejanas.
En cualquier caso, se emplazaron a continuar trabajando para avanzar en el acuerdo, aunque, en el caso del agua, exigieron al Ejecutivo de Pedro Sánchez que asuma responsabilidades y que "se ponga a coordinar", en palabras de Mazón.
Defendieron la necesidad de que el sentido común esté presente en la toma de decisiones políticas y reivindicaron otra forma de "construir España" lejos de la exigencia de "privilegios territoriales" o "soberanismos".
Tras la firma del convenio, Page puso en valor la Constitución Española y el modelo de las autonomías y defendió que "la diversidad no está reñida con la unidad". En este sentido, aseguró que esta diversidad "no puede esconder privilegios ni injusticias".
Al respecto, Carlos Mazón abogó por centrarse "en lo que une", con unidad de Estado para resolver los problemas de los ciudadanos. "Las competencias son herramientas para dar un servicios, no una excusa para agitar banderas", defendió.
A juicio del presidente valenciano, es de "agradecer" que se "pueda hablar de España y de construir España sin llevarlo a un debate sobre más o menos competencias o soberanía, sino sobre cómo mejorar la calidad de vida de la ciudadanía".
Financiación autonómica
Mazón aprovechó la cita para exigir la reforma de la financiación autonómica que corrija los desequilibrios existentes. "No sirve de nada que hablemos de equidad o solidaridad entre dos comunidades autónoma si alguno de esos 17 motores de España no están en las mismas condiciones para poder correr en los mismas carreras", añadió
Page, por su parte, defendió que lo prioritario es conjurarse para que "algunos no consigan privilegios fiscales". Después, según consideró, hay que sentarse a ver cómo se reparte el resto.
Respecto al agua, ambos dirigentes parten de posturas más alejadas, tal y como se escenificó en el encuentro. Sin embargo, mostraron sintonía respecto a dos cuestiones: que el agua es de todos y que es necesario iniciar el diálogo para llegar a acuerdos. En este sentido, instaron al Ejecutivo central a liderar esta cuestión y a trabajar porque exista un entendimiento.
El presidente de Castilla-La Mancha reconoció que este asunto es "complicado" y añadió que el "mejor camino sería llegar a acuerdos y consensos", aunque afirmó que cuando no sea posible "para eso están los tribunales". Ante estas palabras, Carlos Mazón recordó que la Comunitat Valenciana también ha acudido a los tribunales "para exigir rigor científico".
"Hoy hemos hablado de financiación y vamos por buen camino. Y empezamos los dos por primera vez a hablar de agua", celebró Mazón.
Acuerdo sanitario
El acuerdo sanitario suscrito por los dos presidentes, cuya aplicación es inmediata, hace referencia a la atención especializada de primer y segundo nivel, a la farmacia hospitalaria y a la atención de emergencias, entre otras cuestiones.
Beneficiará a los 13.778 vecinos. Los residentes de cinco municipios del Valle de Ayora podrán tener como referencia el Hospital de Almansa para atención sanitaria. Igualmente, los vecinos de 22 localidades de la provincia de Cuenca podrán ser atendidos en el Hospital de Requena.
Además, según anunció Mazón, el objetivo es aprobar convenios similares con los gobiernos de las demás comunidades vecinas. Así, el jefe del Consell aseguró que existe predisposición con Aragón y con Murcia, con cuyos presidentes ya ha hablado. Respecto a Cataluña, Mazón señaló que llamará "en cuanto haya presidente".
¿En qué consiste?
Estos vecinos podrán tener como hospital de referencia para la atención especializada de primer nivel o comarcal los recursos y prestaciones de los centros hospitalarios de Almansa o Requena en igualdad de condiciones que el resto de los ciudadanos de ambas regiones.
Respecto a la atención especializada que requiera mayor complejidad asistencial, se realizará por los centros hospitalarios de referencia de la Comunitat Valenciana o de la Comunidad de Castilla-La Mancha, indistintamente, en las mismas condiciones que los ciudadanos de esa comunidad. La derivación al centro hospitalario de referencia se hará siempre con la opción del paciente.
Asimismo, las pruebas de diagnóstico y tratamientos que no estén disponibles en los respectivos hospitales de Requena y de Almansa y que se proveen con medios externos concertados para su propia población, se podrán solicitar igualmente para ciudadanos de la otra comunidad.
De manera general, la atención sanitaria urgente domiciliaria se prestará por el Punto de Atención Continuada (P.A.C.) correspondiente a su Zona Básica de Salud o por aquel de la Zona Básica de Salud en que se encuentre el paciente en el momento de requerir asistencia sanitaria urgente.
Respecto a la asistencia y transporte sanitarios urgentes, serán los Centros de Coordinación de Urgencias y Emergencias los que determinarán los medios a utilizar, de los disponibles, más adecuados a la situación generada.
El transporte sanitario no urgente será siempre prestado por región de residencia del paciente, eliminando todo tipo de limitaciones territoriales. No obstante, en caso de dificultad derivados de la organización de los servicios, circunstancias meteorológicas o cualesquiera otros, la prestación de este servicio quedará garantizada por cualquiera de las comunidades.
El acuerdo también establece que la dispensación de fármacos y productos propios de farmacia hospitalaria para pacientes externos se realizará en el hospital de la prescripción.
Igualmente, ambas comunidades impulsarán los mecanismos necesarios para lograr el acceso a las historias clínicas electrónicas propias de cada zona. Asimismo, se adoptarán las medidas de identificación clínica personal, necesarias para la asistencia, sin que alteren la Tarjeta Sanitaria de su comunidad autónoma de origen.
Las prestaciones sanitarias que se realicen serán asumidas económicamente por la Administración que presta la asistencia, no dando derecho a compensación económica alguna.
Por otro lado, ambos dirigentes autonómicos también suscribieron un acuerdo de cooperación en actividades de docencia, formación e investigación en materia sanitaria.