Valencia

Rubén Baraja, entrenador del Valencia CF, se confesó este jueves sobre los comentarios que recibió hace 15 meses, cuando tomó la arriesgada decisión de coger las riendas de un club abocado al descenso a segunda división. "La gente me decía: '¿Tú estás seguro? Es un momento de gran dificultad, tienes mucho que perder'. Yo soy de los que pensaba que tenía mucho que ganar", manifestó.

El también exjugador valencianista, protagonista de la época más gloriosa del club hace dos décadas, se pronunció en estos términos en el breve discurso que pronunció en la Tertulia Torino, que le otorgó este año su distinción en el Ateneo Mercantil de Valencia.

La leyenda che también realizó un balance de la temporada que está a punto de concluir. Consideró que "este año ha sido la demostración" de que "podíamos hacerlo bien". Todo ello, "independientemente de cualquier circunstancia que esté alrededor del club".

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Fue un acto solemne en el que se pronunciaron rotundas críticas a la gestión del club que realiza el máximo accionista, Peter Lim, responsable de la desinversión galopante que sufre el seis veces campeón de liga. Baraja las escuchó desde el inicio del acto, en primera fila, y solo aludió al escenario que vive el equipo de forma sucinta y comedida.

Según relató el Pipo, no dudó ni un instante en aceptar la propuesta que recibió el año pasado pese a la situación crítica del club, que coqueteó con el descenso hasta el último momento. Entrenar al equipo blanquinegro, según dijo "siempre" había sido su "sueño".

"El 14 de febrero me llama el Valencia. El sueño se puede hacer realidad. 'Cuando te llama el Valencia, no se puede decir que no', le dije al interlocutor", aseguró. La gente me decía: '¿Tú estás seguro? Es un momento de gran dificultad, tienes mucho que perder'. Yo soy de los que pensaba que tenía mucho que ganar", relató el entrenador blanquinegro.

Fue entonces cuando inició un extenso elogio a toda la afición valencianista. "Sabía que era un momento en el que iba a tener detrás algo que es intangible, como es a todos vosotros, a los valencianistas, que ibais a apoyarnos. Si no hubierais estado vosotros detrás, no habríamos conseguido que el Valencia permaneciera en primera división", manifestó.

"Una etapa diferente"

Tras este hito, según dijo, empezó "una etapa diferente". Así describió la temporada que ahora termina. La abordó con la "máxima responsabilidad", con "exigencia alta", si bien la presidenta del club, Layhoon Chan, situó el objetivo a principio de temporada en lograr, de nuevo, la permanencia.

Baraja, sin embargo, consideró esta travesía "también ambiciosa". "Pensando que con vuestro apoyo, con vuestra comprensión, comprendiendo las dificultades que iba a tener la temporada, podíamos hacerlo bien", explicó.

"Este año ha sido la demostración de que cuando nuestra afición está detrás, nos apoya, cree en nuestros jugadores, cree en el equipo, independientemente de cualquier circunstancia que esté alrededor del club, el equipo creo que ha respondido, que ha dado el máximo", agregó.

"La sensación que me queda es que cuando el valencianismo está unido, somos mucho más fuertes. Amunt Valencia", concluyó Rubén Baraja.

"Aniversario triste"

El acto contó con la intervención inicial del subdirector de EL ESPAÑOL y miembro fundador de la Tertulia Torino, Vicente Ferrer Molina, que calificó de "aniversario triste" los diez años que Lim ha cumplido como máximo accionista.

"En la Tertulia nunca imaginamos tantas cosas...", dijo sobre la etapa gloriosa de Baraja, que cosechó dos Ligas, una UEFA, una Supercopa de Europa y una Copa del Rey. Pero "tampoco la pesadilla que estamos sufriendo", contrapuso.



"Es muy difícil hacer llegar las razones y los sentimientos a alguien que vive a 12.000 kilómetros de distancia, a 16 horas de avión. Yo, y hablo a título personal, ni siquiera le reprocho que haya incumplido su palabra de volver a situar al Valencia entre los grandes clubes de Europa. Para mí, lo peor es el desprecio, la falta de implicación emocional, que no haya querido mirar a la cara a los valencianistas, que ni siquiera haya querido conocernos", afeó a Peter Lim.

Ferrer Molina, frente a esta actitud, resaltó el valor inmaterial del club. "Si el fútbol fueran 22 tipos pegando patadas a un balón, Rubén, hoy no estaríamos aquí. Si Mestalla fuera solo un bloque de cemento con el que poder especular, hoy no estaríamos aquí. Y si el Valencia Club de Fútbol fuera simple y llanamente una Sociedad Anónima, hoy no estaríamos aquí", aseveró.