La pesadilla de muchos valencianos se materializó este sábado por la noche en la localidad castellonense de Alqueries. Un toro embolado, con los cuernos en llamas, entró en un domicilio del barrio del Quadró.
El animal sembró el pánico. Permaneció durante varios minutos en interior del domicilio, que carecía en su puerta principal -al menos según las imágenes difundidas- de los barrotes metálicos recomendados para las zonas expuestas al bou embolat.
Como se aprecia en el vídeo, los vecinos, no sin esfuerzo, lograron que el astado abandonara finalmente el inmueble.
La grabación de un testigo inmortalizó la escena, con la puerta de la vivienda resplandeciente por el fuego que portaba el toro y los ocupantes, impotentes, contemplando lo que ocurría salvaguardados en la terraza.
Finalmente, el toro abandonó la casa con furia, a toda velocidad. El Centro de Coordinación de Emergencias de la Comunitat Valenciana no ha informado de heridas asociadas a este suceso.
Cuestión aparte son los desperfectos materiales que, a buen seguro, habrá causado la res con su inesperada irrupción en la vivienda.