Valencia

La alcaldesa de Valencia, María José Catalá, ha visitado este lunes el depósito de tormentas de El Saler, una infraestructura medioambiental que ha supuesto la inversión de 2,4 millones de euros y que ya está en funcionamiento.

En su visita, acompañada por el concejal de Ciclo Integral del Agua, Carlos Mundina, y la alcaldesa pedánea de El Saler, Blanca Vilches, Catalá ha destacado "la necesidad" de este nuevo sistema y la importancia de crear nuevos depósitos.

Esta nueva infraestructura hidráulica está enmarcada dentro del plan de sostenibilidad del Ayuntamiento de Valencia por la Capitalidad Verde Europea. Este reconocimiento supone un "ejercicio de responsabilidad que debe ir acompañado de obras, mejoras e inversiones", tal y como destaca Catalá.

Su puesta en funcionamiento sigue la línea "fundamental" de "preservar la calidad de las aguas y evitar vertidos contaminantes sobre L'Albufera". De hecho, durante las lluvias acaecidas los días 27 de mayo y 1 de julio el depósito de tormentas evitó el vertido de 644 metros cúbicos y de 420, respectivamente.

La nueva infraestructura subterránea tiene una capacidad de almacenamiento de 980 metros cúbicos y 1.250 de emergencia. Además, dispone de bombas anti-atasco que permiten su desbloqueo de forma automática.

Esta instalación almacena las aguas más contaminadas que se decantan, poco a poco y de forma regulada, a la Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) de El Saler, una vez finalizado el periodo de precipitaciones.

María José Catalá junto con los vecinos de El Saler

Nuevos depósitos

Este sistema es uno de los siete depósitos que el Ayuntamiento tiene proyectados. En esta línea, la primera edil ha anunciado el inicio de los trámites correspondientes para llevar a cabo la construcción del depósito de Malva-rosa.

Un nuevo proyecto que, junto con el depósito de Eugenia Viñes, "permitirá cubrir y mejorar la calidad de las aguas de las playas de la zona norte de la ciudad", según ha indicado la alcaldesa.

Sin embargo, estos proyectos requieren acción por parte del Gobierno central. Catalá ha pedido al Ministerio de Transición Ecológica "conectar sus seis tanques de tormentas", algo necesario para evitar la llegada de aguas contaminadas a L'Albufera y proseguir en el objetivo de "vertidos cero".

También ha reivindicado que el Ayuntamiento ha recurrido a la acción judicial "para reclamar los 20 hectómetros cúbicos de caudales del sistema Júcar-Turia de aportación hídrica para L’Albufera" y demanda una "mayor implicación del Ministerio para cuidar y salvaguardar el lago".