El presidente de la Generalitat Valenciana y presidente del PPCV, Carlos Mazón, convocó este jueves una reunión del comité ejecutivo autonómico y de la junta directiva autonómica del partido. Se producirá a las 18.30 horas.
La misma llega tras el órdago de Santiago Abascal, redoblado este miércoles. Vox ha dado por rotos los cinco gobiernos autonómicos en los que participa con el PP, por aceptar esta última formación el reparto por toda España de menores inmigrantes no acompañados llegados a las islas Canarias.
El Gobierno Valenciano, del que Mazón es presidente y Vicente Barrera, el vicepresidente primero, sería uno de los afectados. Barrera, insistió este jueves en que su cargo es "del partido" y en que hará lo que la formación considere.
Fue una escueta declaración. Asegura que no dirá "nada" hasta esta tarde. Tanto Barrera como la presidenta del parlamento valenciano, María de los Llanos Massó, participarán en la ejecutiva nacional de Vox en Madrid en la que Abascal puede decidir la ruptura de los Gobiernos autonómicos.
Pese a las circunstancias, fuentes de la Generalitat trasladan "tranquilidad absoluta" y destacan que "la coalición ha funcionado sin problemas". Subrayan también que "seguirán reclamando al gobierno central más recursos para poder atenderlos, como han hecho hasta ahora".
"Mientras yo siga"
Los principales dirigentes valencianos de Vox subrayan su disciplina desde que estalló la polémica. Tanto Barrera como el portavoz parlamentario, José María Llanos, manifestaron sin ambages los días previos que acatarán las órdenes de Abascal.
Este jueves, en la sesión de control a Mazón en Les Corts Valencianes, Barrera intervino con rostro serio. Y pronunció, cabizbajo, durante una interpelación, un inquietante "mientras yo siga en este gobierno".
El grueso de las fuentes consultadas por EL ESPAÑOL tanto en el PP como en Vox en la Comunitat Valenciana se distancian en privado de la tensión que se ha generado en Madrid. Hay partidarios de la ruptura, pero la mayoría apuesta por mantener la actual composición del Ejecutivo y apela a la "estabilidad" demostrada en el primer año de la legislatura.