El esgarraet valenciano, también llamado esgarrat, es un plato típico de la cocina valenciana que no se conoce en el resto de España. La receta original es muy sencilla, solo se necesita bacalao y pimientos, y es una de las joyas del recetario de la Comunitat Valenciana.
Su nombre se deriva precisamente del método de elaboración, en el que hay que desgarrar los ingredientes, todos ellos de gran sabor y presentes en cualquier hogar.
La base es el bacalao con pimiento rojo, ajo y aceite. Algunas variantes también incorporan las aceitunas, que todo valenciano conoce como olivas. Pero en cualquier caso hay que hacer tiras el bacalao y el pimiento hasta lograr una tapa sustanciosa en la que mojar pan.
"Se sirve con frecuencia en las barras de los bares, donde se rebaña con rapidez, pero es tan saludable y sencillo de preparar que puede convertirse en un imprescindible de cualquier cocina", recoge el recetario de la cadena de supermercados valenciana Consum.
El esgarraet valenciano es genuino, por mucho que pueda parecerse a otras recetas. En Cataluña se puede confundir con la esqueixada, que también significa desgarrada, pero para elaborarla se usan los pimientos verdes, la cebolla y el tomate. Es famosa la escalivada, a base únicamente de verduras, que además han sido cocinadas sobre leña o brasa.
"E incluso al sur de la Comunitat Valenciana existe el espencat, cuya elaboración es muy parecida, pero además incluye berenjena y, en ocasiones, huevo duro", recuerdan desde Consum.
No obstante, siendo puristas, "el auténtico esgarraet solo se compone de bacalao con pimientos, y la gracia está en el contraste del salado con el dulce, además del aliño adecuado".
Se trata de un plato histórico, que antiguamente nutría a los trabajadores que faenaban el mar y la huerta.
Para cocinarlo solo se necesitan unos 20 minutos de tiempo y un poco de habilidad Una comida nutritiva y apetecible para los días de verano.
Turismo gastronómico
La Comunitat Valenciana cuenta con una cultura gastronómica de gran valor, recetas tradicionales tan internacionales como los arroces o la paella, productos agroalimentarios diversos y de alta calidad, según destaca la Generalitat.
Su sector hostelero está consolidado y, en los últimos años, un número importante de cocineros y cocineras, líderes de este movimiento gastronómico al que aportan su creatividad y excelencia: 28 estrellas Michelin y 45 restaurantes con soles Repsol.
La gastronomía propia es un recurso de primer orden para el turismo de la Comunitat Valenciana. Desde el Gobierno valenciano insisten en que "refuerza la esencia y los valores del estilo de vida que nos identifica como destino mediterráneo: hospitalario y saludable, reflejo de una Dieta Mediterránea declarada por la Unesco Patrimonio Inmaterial de la Humanidad".
La influencia de la gastronomía en los viajes y el crecimiento de los visitantes atraídos por la cocina y la despensa de los destinos turísticos, es una realidad.
Así, la gastronomía se ha convertido hoy en un segmento de oportunidad para la competitividad y el posicionamiento turístico, un producto que contribuye a la sostenibilidad y al desarrollo territorial, con importantes beneficios intersectoriales.
El área valenciana de Turismo impulsa el turismo gastronómico desde un concepto amplio, contando con todos los agentes que intervienen en la "cadena de valor" y con "un enfoque compartido por un buen número de iniciativas y proyectos, públicos y privados, surgidos en la Comunitat Valenciana".