Adrián y Enrique eran socorristas en la playa cuando uno de sus rescates salió mal. Se adentraron en el agua a gran velocidad, pero cuando alcanzaron a la mujer que se estaba ahogando fue demasiado tarde. Intentaron reanimarla, pero sin éxito.
Este suceso les marcó, y desde entonces, no dejaron de imaginar un aparato para aplicar la tecnología en los rescates marítimos. Al finalizar sus jornadas como vigilantes de la playa, dibujaban bocetos y estudiaban cómo poner en marcha su proyecto: un dron de rescate, que llegara antes a las víctimas y fuera decisivo para salvar sus vidas.
En 2015, tras unos años luchando por ponerlo en marcha, lo consiguieron. Adrián Plazas y Enrique Fernández fundaron General Drones, una empresa valenciana pionera, y llenaron durante varios veranos las playas valencianas con sus drones.
Desde entonces han participado en numerosos rescates. ¿Han salvado vidas? Los datos hablan por sí solos. Según las cifras que maneja la compañía, en la campaña estival de 2022 hicieron 189 intervenciones en 22 playas y lograron rescatar a 16 personas.
La clave para afirmar que ayudan a salvar vidas es que consiguen recortar el tiempo de respuesta ante la emergencia y esto, en el caso de los ahogamientos, es clave, como puede observarse en los vídeos que graban los propios drones.
¿Cómo funcionan?
El dron, bautizado como Auxdron, está específicamente diseñado para su uso en equipos de salvamento marítimo. Es capaz de resistir, por lo tanto, las duras condiciones meteorológicas propias de las playas y está protegido para que ni el agua ni la arena le afecten.
El aparato tarda 5 segundos en despegar y tiene 25 minutos de autonomía. Además, es capaz de alcanzar los 85 kilómetros por hora.
En cuanto la persona que se encarga de pilotar la aeronave detecta una situación de riesgo, el dron vuela a gran velocidad y en pocos segundos es capaz de alcanzar a la víctima y desplegar un salvavidas. De esta manera, la persona en situación de emergencia puede esperar a ser rescata por los socorristas de manera mucho más segura.
Además, el dron ha sido mejorado durante los últimos años y es capaz también de desarrollar labores de vigilancia y comunicación para mejorar la prevención de accidentes. Además, ejecuta tareas de búsqueda y localización.
Tiene un altavoz que transmite mensajes a los bañistas. Esto permite informar sobre el estado del agua y dar instrucciones cuando hace falta prohibir el baño por un cambio de color en la bandera.
Otra de sus funciones es la búsqueda de menores que hayan podido desaparecer en la orilla, ya que con su cámara es capaz de tener una visión completa de la situación de la playa. Desde la empresa también destacan que estos aparatos contribuyen a que disminuyan los hurtos.
El caso de Sagunto
Sagunto es en estos momentos uno de los pocos ayuntamientos que cuenta con este servicio. De hecho, fue "pionero" en su puesta en marcha, que se remonta al año 2017.
El servicio de dron dispone de dos vehículos aéreos no tripulados, uno de ellos ubicado en la playa de Puerto de Sagunto, donde en temporada alta pueden concentrarse hasta 8.000 personas según datos municipales, y el otro situado en la de Almardá. Están operativos todos los días de la semana en un horario desde las 10 de la mañana a las 8 de la tarde.
"Sagunto fue un municipio pionero en la incorporación de un dron para garantizar la seguridad en las playas, una tecnología, además, desarrollada por una start-up local, General Drones", defiende el alcalde, Darío Moreno, a EL ESPAÑOL.
En este sentido, afirma que "las sucesivas mejoras en el servicio de socorrismo y salvamento han convertido nuestras playas en unas de las más seguras a nivel estatal".
Además, destaca que la utilización de esta tecnología "permite ir un paso más allá, en conjunción con el resto de medios materiales (motos acuáticas y lanchas de rescate, por ejemplo), además de la importante labor que realizan los 45 profesionales del servicio de vigilancia, más 11 agentes de la Policía de Playas".
"Principalmente, el dron ayuda a reducir los tiempos de respuesta, que son vitales en situaciones de emergencia en el mar, además de permitir un control más rápido y eficaz de los 13 km de playas que tenemos", concluye.
En esta línea, el concejal de Playas, Roberto Rovira, relata que hace poco gracias a la actuación de esta tecnología se pudo rescatar a 8 personas que estaban bañándose con bandera amarilla. "El balance es súper positivo, nos ha ayudado a salvar vidas, de menores o de gente mayor que tiene más dificultades", destaca.
Además, señala que los socorristas se han adaptado muy bien a este "plus de ayuda". Al respecto, señala que la introducción de los drones no ha supuesto en ningún caso una reducción de personal. "Desde 2017, el presupuesto para playas ha subido un 80%", defiende.