En un ordinario control antidrogas en un pueblo de Valencia han detenido a un veinteañero con siete reclamaciones judiciales, dos de ellas para ingresar en prisión. El arrestado, de 28 años y origen colombiano, se enfrenta ahora a los cargos de delito de resistencia y desobediencia a la autoridad tras negarse a identificarse en el citado control, salir huyendo y forcejear con los agentes.

Todo empezó con el dispositivo contra la venta al menudeo de sustancias estupefacientes que había montado la Policía Nacional en su labor de prevención de la seguridad ciudadana. En este marco los agentes observaron a un joven en actitud sospechosa mientras patrullaban por la calle Teodoro Llorente de Burjassot.

Inmediatamente los policías procedieron a su identificación y este se mostró en un estado de gran nerviosismo. Una de las razones para ello es que no aportaba ningún documento físico que lo identificara y, además, los nombres y datos que ofrecía eran erróneos. En el cacheo encontraron en uno de sus bolsillos una bolsita con una sustancia estupefaciente, que en principio identificaron como marihuana.

A partir de ahí, la situación empezó a complicarse. Los agentes solicitaron al sospechoso que les acompañara a dependencias policiales. Allí le identificarían plenamente para poder proponer la sanción por la tenencia de sustancia estupefaciente. El joven se negó a ello, alegando que en ese momento no podía y, ante la reiteración de los policías, salió huyendo.

La persecución desde los alrededores del campus donde se encontraban terminó tras un forcejeo en el aparcamiento de la Plaza 9 de Octubre donde fue interceptado. Allí fue donde ya se le detuvo esta vez como presunto autor de un delito de resistencia y desobediencia.

La sorpresa apareció una vez en dependencias policiales donde tras consultar las bases de datos, los agentes averiguaron que al ahora arrestado le constaban siete reclamaciones judiciales para su detención. Dos de ellas eran por malos tratos físicos en el ámbito familiar cuatro por quebrantamiento de condena, otras dos de ellas para ingresar en prisión y otra por estafa, así como una orden de expulsión también vigente. El detenido, con numerosos antecedentes policiales, ha pasado ya a disposición judicial.