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"Una traición a todos los valencianos". Así se refirió la portavoz y consellera de Hacienda, Economía y Función Pública, Ruth Merino, a que el conseller de Hacienda durante los gobiernos de Ximo Puig, Vicent Soler, forme parte del grupo que diseñará el denominado cupo catalán.

En rueda de prensa tras el pleno del Consell, Merino, expresó su "asombro" y consideró que es "imperdonable". "Es una nueva traición del PSOE a los ciudadanos de la Comunitat Valenciana", añadió.

En este sentido, criticó que el partido socialista haya roto el consenso existente entre los sindicatos, patronal y partidos políticos respecto a las exigencias al Gobierno central por la financiación autonómica.

En la última reunión de la plataforma que aglutina a estos agentes, el PSPV se borró del pacto de exigir un fondo de nivelación transitorio mientras se apruebe un nuevo sistema que corrija la infrafinanciación de la Comunitat Valenciana, que junto a Murcia, es la que menos recursos recibe.

Merino lamentó que una persona que ha sido conseller de Hacienda de la Comunitat Valenciana y que durante "muchos años" ha defendido la reforma del sistema de financiación ahora "se someta a las necesidades del independentismo catalán y al cupo catalán".

Vicent Soler será uno de los expertos en Economía Aplicada a los que ha encargado el Ejecutivo catalán diseñar la propuesta de financiación singular para Cataluña. Entre este grupo también está un alto cargo del anterior Govern de Pere Aragonés y será coordinado por el economista y exdiputado del PSC Martí Carnicer.

La secretaria general del PSPV, Diana Morant, respondió ante estas críticas para defender la elección de Soler.

Afirmó en sus redes sociales que "es un orgullo que un valencianista como él nos represente en la construcción de una mejor España más plural y más justa".

La ministra socialista defendió que "el exconseller de Hacienda, catedrático y decano de la Facultat d'Economia de la Universitat de València fue represaliado por el franquismo por defender el autogobierno valenciano".

"Golpe de estado"

Para el Ejecutivo de Mazón, el concierto económico Cataluña es "un golpe de estado fiscal". Por ello, el jefe del Consell afirmó que "la Comunitat Valenciana ni va a estar callada ni se puede permitir el lujo de estar callada".

Según denunció Mazón tras conocerse el acuerdo, "el socialismo se ha convertido en un fondo buitre con sede en Barcelona". "Lo que está haciendo es que todos tengamos muchos más problemas al final de la corrida para poder financiar nuestra sanidad, nuestra educación y nuestros servicios sociales, porque de eso va la financiación", añadió.

Avanzó una ofensiva legal por parte de la Generalitat Valenciana cuando se materialice el acuerdo, que consistirá en un recurso ante el Tribunal Constitucional.

Esta es también la estrategia de la alcaldesa de Valencia, María José Catalá, que pretende presentar junto a un grupo de ciudades un conflicto ante el Tribunal Constitucional por vulneración de la autonomía local.

Entiende que el acuerdo fiscal entre el Gobierno de Pedro Sánchez y ERC "supondrá una merma" en la financiación de las autonomías, pero también en los recursos que reciben los municipios.