Casi la mitad de las víctimas de la DANA que arrasó parte de la provincia de Valencia el pasado 29 de octubre fallecieron en sus propios hogares, garajes y sótanos.
Concretamente, 103 personas murieron ahogadas en sus domicilios o cuando bajaron para intentar sacar sus vehículos sin ser conscientes de la riada que iba a asolar sus municipios.
Así se desprende del segundo informe realizado por el Centro de Integración de Datos (CID) constituido como consecuencia de la DANA que realiza un análisis detallado de las 221 víctimas mortales que están identificadas. Todavía hay una persona fallecida sin identificar.
Concretamente, 68 personas fueron halladas en sus casas, 30 en sus garajes y 5 en sus sótanos. Además, en la calle se hicieron 27 levantamientos de cadáveres.
El informe recoge el fallecimiento de 5 personas en la residencia de Paiporta y 6 en la de Picanya.
Según los datos oficiales difundidos por el Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana (TSJCV), en esta catástrofe han muerto 132 hombres y 89 mujeres, de 12 nacionalidades distintas.
Por rango de edad, la mayoría de las víctimas superan los 61 años, con 142 fallecidos, lo que supone un 64% del total.
Además, han muerto 7 niños menores de diez años y 13 personas entre los 11 y los 30.
Paiporta, con más muertes
En cuanto al mapa del luto, la mayoría de los fallecimientos se concentran en cuatro localidades: Paiporta (45), Catarroja (25), Valencia (17) y Alfafar (15).
Le siguen los municipios de Massanassa (12), Sedaví (11) y Benetússer (10) y Picanya (10).
La riada de Valencia es la cuarta catástrofe natural más mortífera registrada en Europa en lo que va de siglo, tras el devastador terremoto de Turquía del año pasado (51.000 fallecidos) y los dos seísmos de Italia: en L'Aquila, en 2009 (309 muertos) y en el centro del país en 2016 (299).
Picanya este martes
Hace casi un mes, la provincia de Valencia se vio asolada por las fuertes lluvias y el desbordamiento del barranco del Poyo, que anegó la comarca de L'Horta Sud, en el área metropolitana de Valencia.
En total, más de 70 pueblos han sufrido daños y se enfrentan ahora a la tarea de la reconstrucción. Según la patronal valenciana, las pérdidas económicas ascenderán a 9.000 millones de euros.
El CID es un órgano técnico que está integrado por una Oficina Forense y una Oficina de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, con agentes especializados de la Guardia Civil y la Policía Nacional.
Su función es reunir y supervisar los diferentes informes de identificación que se realicen por las distintas instituciones a las personas fallecidas en sucesos con múltiples víctimas.