Lina, la vecina de Horno de Alcedo rescatada ‘in extremis’ la noche de la DANA: “Me despedí de mi familia”
- Durante la noche del 29 de octubre, más de 300 personas fueron rescatadas desde la primera hora que se inició la inundación.
- Más información: Las ayudas del Gobierno por la DANA siguen sin llegar un mes después: la Generalitat ya ha entregado 22 M y Juan Roig, 20
Las historias de una tragedia de tal magnitud como fue la DANA se suceden incluso un mes después de las devastadoras inundaciones que golpearon 70 municipios de la provincia de Valencia. Se cuentan por cientos y miles tanto héroes como afectados de aquellas personas que vivieron el "terrorífico" acontecimiento.
Así lo describe Lina, vecina de Horno de Alcedo, una de las tres pedanías del sur de la ciudad de Valencia que sufrieron inundaciones y destrozos en sus calles, negocios y viviendas. "Era una escena de película, en cuestión de segundos teníamos que decidir qué hacer para salvarnos", explica en declaraciones a EL ESPAÑOL.
Lina se encontraba en su puesto de trabajo cuando el agua llegó hasta el municipio: "Estaba trabajando en la gasolinera del polígono de Horno de Alcedo cuando el agua entró a raudales", afirma.
"En el momento en el que el agua entró la puerta se atrancó; estábamos una mujer mayor y yo dentro", relata Lina. En ese momento la toma de decisiones se convirtió en algo "de vida o muerte". "Conseguimos salir, la mujer quería coger una escalera para subir al tejado, pero le dije que o subía o me iba. La cogí del brazo y subimos. No nos conocíamos de nada, pero en ese momento como si fuéramos de confianza", afirma Lina.
Desde el momento en el que el agua comenzó llegar al lugar en el que se encontraba junto a la mujer mayor "de unos 70 años", hasta que pudo ser rescatada, pasaron cinco horas en las que afirma que tuvo "muchísima suerte".
"De mi casa al trabajo solo hay 500 metros, volví a mi casa a las 2:10 horas de la madrugada. Fueron los 500 metros más largos de mi vida", reconoce Lina.
"Estuve en contacto con los bomberos, de hecho, hablé con el Jefe de Bomberos. Me explicaban que había lanchas por la zona y que conocían nuestra posición. Era cuestión de tiempo que llegaran", narra Lina.
De hecho, durante esas horas incluso pudo hablar con la alcaldesa de Valencia, María José Catalá, a la que le informó de la angustiosa situación en la que se encontraba. "Me sentí muy arropada y acompañada durante ese tiempo", asegura.
Si algo le queda a Lina de las horas que pasó resguardada sobre el techo de la gasolinera es que "siempre hay una esperanza". "Llegué incluso a llamar a mi familia, a mis hijos para despedirme de todos. Pensé: "Qué mal acabar así". Está claro que cuando te toca, te toca", explica Lina.
Rescate
Las complicadas condiciones a las que se enfrentaron los efectivos de rescate junto con la gran cantidad de personas que necesitaban auxilio en esos momentos hizo muy complicado que pudieran llegar a todos los lugares en un primer momento.
En el caso de Lina, el rescate fue realizado en lanchas acuáticas en unas condiciones de visibilidad muy difíciles. "Era difícil que nos vieran porque estaba todo muy oscuro, pero sentí un calor y una cercanía muy grande porque sabía que estaban".
Para Lina, el camino de vuelta a casa en la lancha fue muy complicado por la dura situación que estaba presenciando en primera persona. "En cada esquina habían resguardadas una o dos personas, mientras volvía se escuchaba a la gente llorar y pedir ayuda", cuenta.
Finalmente, Lina pudo regresar a casa. Un mes después no olvida el empeño de los efectivos de rescate y el calor y la seguridad que le hicieron sentir en la noche más "terrorífica" de su vida y en una de las más trágicas de Valencia.
Una larga noche en el Ayuntamiento
Durante la noche del 29 de octubre, los servicios municipales trabajaron en coordinar las diferentes labores de rescate ante las inundaciones acontecidas en las pedanías atendiendo llamadas y desplazando a los equipos de emergencias.
De hecho, la propia alcaldesa María José Catalá, junto con el equipo de alcaldía trabajaron durante toda la noche y coordinaron el reparto de efectivos para atender a todas las personas que necesitaban ser auxiliadas.
En un vídeo al que ha tenido acceso EL ESPAÑOL se puede ver a la alcaldesa, María José Catalá, junto al portavoz del Ayuntamiento de Valencia, Juan Carlos Caballero atendiendo a llamadas de las personas en situación crítica en las pedanías durante el día en el que tuvo lugar el temporal.
Durante la noche del 29 de octubre, más de 300 personas fueron rescatadas desde la primera hora que se inició la inundación hasta el amanecer en las pedanías de Valencia y pueblos limítrofes.
Además, a esas personas hay que unir las 3.000 personas rescatadas por la EMT en los diferentes puentes de la V-30, Pista de Silla que llegaban de las carreteras donde habían quedado bloqueados.