Valencia LA DANA DEL SIGLO

Los ingenieros predijeron en 2010 con mapas exactos las inundaciones en el barranco del Poyo: 3 gobiernos lo ignoraron

El proyecto de Typsa, a instancias de la Confederación del Júcar, alertó de "un elevado riesgo de inundaciones para las poblaciones a partir de Paiporta".

Más información: La Generalitat estalla tras oír al ingeniero que iba a encauzar el Poyo: "La inacción del Gobierno tuvo un impacto devastador"

Valencia
Publicada

"A partir de Paiporta, el cauce mantiene una capacidad máxima de 800 metros cúbicos por segundo, lo que se traduce en un elevado riesgo de inundaciones para las poblaciones existentes aguas abajo de dicho punto".

La frase forma parte del trabajo realizado en 2010 por los ingenieros de caminos, canales y puertos de Typsa, la empresa que redactó el proyecto para encauzar el fatídico barranco del Poyo.

El documento, al que ha tenido acceso EL ESPAÑOL, contiene mapas predictivos. En ellos, los profesionales predijeron con exactitud lo que ocurriría en caso de desbordamiento. Pero tres gobiernos (dos del PSOE y uno del PP) orillaron el proyecto.

El mapa que encabeza este artículo es "una simulación de un evento representativo T=500 en la cuenca del Poyo". Es decir, la predicción del riesgo de inundación fluvial poco probable o excepcional, que puede darse una vez cada cinco siglos.

En lo único en lo que se equivocó fue en la magnitud, que resultó mucho más destructiva el pasado 29 de octubre de lo representado en el plano en 2010. El agua se adentró más en las zonas urbanas.

Pero todas las áreas señaladas en el mapa por los ingenieros de Typsa sufrieron con precisión la inundación por el desbordamiento. Incluida la de la localidad de Paiporta, atravesada por el barranco del Poyo.

Este fue el municipio donde se certificaron más víctimas mortales tras las riadas: 46 del total de 226 personas que perdieron la vida en el conjunto de la provincia.

Los técnicos lo advirtieron. Typsa redactó su proyecto a instancias de la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ). Su iniciativa constaba de siete actuaciones por un valor total de 240 millones de euros.

Pero nunca se ejecutó, tal y como relató a este periódico Javier Machi, el entonces director valenciano de Typsa. El proyecto logró la preceptiva declaración de Impacto Ambiental positiva en 2011, el último año de José Luis Rodríguez Zapatero.

Pero la iniciativa, impulsada durante el gobierno socialista, no fue desarrollada ni con este ni con los dos Ejecutivos posteriores, el de Mariano Rajoy, que comenzó a finales de ese año, ni el de Pedro Sánchez tras la moción de censura de octubre de 2018.

La predicción

Los ingenieros que firman el proyecto, Jorge Paciarotti por parte de Typsa y Francisco Franch Ferrer por parte de la CHJ, anticiparon con una gran clarividencia lo que ocurriría catorce años después.

"El problema de las inundaciones del Poyo se inician prácticamente aguas abajo de la A7 donde el cauce desaparece o se reduce notablemente, pasando de disponer de una capacidad de unos 1.200-1.300 m3/s aguas arriba de la A7 a unos 100-120 m3/s en el entorno de la confluencia Poyo-Gallego", manifestaron en su trabajo.

A su juicio, "esto genera, en situación de avenidas, una amplia zona inundable (ver Figura 4 [la que encabeza este texto]), donde las aguas lentamente van retornando a su cauce".

"Parte al propio Poyo aguas arriba del acueducto Júcar-Turia, parte se dirigen por una zona deprimida hacia el barranco de La Horteta, afluente del Poyo a la altura de Torrente, y otra parte inunda la autovía A3 y terminan en el Pozalet", auguraron.

Aguas abajo del acueducto, proseguían, "el cauce del Poyo aumenta considerablemente su capacidad, alcanzando un valor próximo a los 1.500 m3/s (caudal punta parta T=500 años) en la confluencia con el Horteta".

Destrucción generada por la riada en Picanya. Efe / Biel Aliño

Destrucción generada por la riada en Picanya. Efe / Biel Aliño

Sin embargo, advertían, "el cauce continúa con una capacidad similar hasta aguas abajo de Picanya, punto donde se inicia el tramo ya encauzado (para un caudal máximo de 800 m3/s)". En este cuello de botella el agua también desbordó y anegó el núcleo urbano el pasado 29 de octubre.

"A lo largo de este tramo (unos 21 km) existen numerosos puentes y pasarelas muchas de ellas antiguas y vinculadas a las propias poblaciones colindantes como lo son Torrente y Picanya", agregaban en su proyecto.

De todas estas obras, "algunas presentan una capacidad reducida (comparada con los 1.500 m3/s de que dispone el cauce), lo que provoca el desbordamiento de tramos puntuales del barranco del Poyo".

De nuevo, acertaron de pleno. Los puentes se vieron sobrepasados. Hicieron de tapón para los sedimentos y muchos fueron destruidos por las avenidas.

Es aquí cuando los ingenieros firmantes advertían de que, "a partir de Paiporta, el cauce mantiene una capacidad máxima de 800 metros cúbicos por segundo, lo que se traduce en un elevado riesgo de inundaciones para las poblaciones existentes aguas abajo de dicho punto".

La Generalitat estalla

Tras conocer el testimonio de Javier Machi, revelado por EL ESPAÑOL, la Generalitat Valenciana cargó contra el Ejecutivo central. "La inacción del Gobierno tuvo un impacto devastador", aseveraron fuentes de la administración autonómica

Según recuerda el experto, que es en la actualidad el decano del Colegio de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos de la Comunitat Valenciana, "la obra estaba aprobada".

"Lo teníamos ganado por 240 millones de euros. Ahí entraban las siete obras que teníamos previstas para la rambla del Poyo y su entorno. Pero el Gobierno nunca puso el dinero", lamentó.

Según Machi, con el proyecto ejecutado, "el agua sí habría rebosado con los 3.500 metros cúbicos por segundo que se calculan que llegó a llevar el barranco". "Pero apenas habría tenido impacto en los núcleos urbanos. Habría inundado, sobre todo, zonas rurales", aseguró.

Confesó sentirse "frustrado, como todos los ingenieros". "No hace falta haber trabajado en Typsa para sentir esa frustración", manifestó.

A su juicio, contar con esta actuación realizada habría evitado el grueso de las muertes en las poblaciones. "Desde luego. Habría sido una inundación mucho menor, con menor velocidad del agua y menor impacto en las zonas urbanas", consideró.