Kilómetro 37 de la A-38 en el que fue ejecutado de un tiro el exalcalde de Gandía Arturo Torró. EP / Jorge Gil
El horror de la mujer de Torró, exalcalde de Gandía: salió en coche a buscarlo y lo encontró ejecutado de un tiro en el arcén
Su pareja salió a su encuentro porque no le cogía el teléfono, y lo halló sin vida en la carretera. Había sido estrangulado y asesinado dos horas antes.
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Eran las 22:00 de la noche y Arturo Torró no llegaba a casa. Su móvil no daba respuesta, y su mujer salió en coche a buscarlo. Estaba desesperada, porque Arturo siempre cogía las llamadas. Pero no imaginaba el horror que estaba a punto de descubrir.
Según precisan a EL ESPAÑOL fuentes próximas a la familia, realizó el trayecto junto a su hermana. Y pronto, justo al salir de Gandía, divisó el Mercedes de Torró en el arcén. Todavía tenía el motor encendido.
Se temían lo peor. Fueron unos minutos eternos los que transcurrieron hasta que lograron dar la vuelta en la rotonda más próxima, la de acceso a la autopista, para deshacer lo andado y acceder al vehículo de Arturo.
Europa Press
La propia mujer comprobó en primer lugar que no se encontraba dentro del coche. Y al inspeccionar los alrededores, constató el horrible crimen. Su pareja yacía sin vida junto al arcén, tirado entre las plantas de baladre.
Fue una escena desgarradora que aún lo sería más al descubrir los detalles que estaban por conocer. Las dos mujeres llamaron al 112. No fue la única llamada que recibió Emergencias. Había hecho lo propio otro conductor.
Un amigo de Torró relató después que había hablado con él por teléfono mientras conducía, poco antes de las 20:00 horas. El exalcalde del PP colgó porque algo iba mal: el ordenador de a bordo le indicaba que había pinchado una rueda.
La primera hipótesis de la investigación que lleva a cabo la Guardia Civil es que consistió en una ejecución por parte de profesionales del crimen, que sabotearon la rueda de Torró para obligarle a parar y asesinarlo cuando abandonara el vehículo y se encontrara indefenso en la carretera.
Búsqueda de pistas por parte de los agentes de la Guardia Civil en el lugar del crimen. EP / Jorge Gil
Su cuerpo sin vida presentaba, además del disparo a quemarropa en el pecho que le causó la muerte, signos de estrangulamiento que podrían corresponder con una cuerda, utilizada para inmovilizarlo. No se descarta que interviniera más de un asesino en el crimen.
Según ha podido constatar este periódico, Torró había denunciado amenazas de muerte previas a su presunto asesinato, las cuales solo había comunicado a las autoridades y a su círculo más estrecho.
La gran incógnita es el móvil del crimen. El ministro de Interior, Fernando Grande Marlaska, pidió este jueves cautela y margen para que los agentes de la Benemérita avancen en la investigación.
La Unidad Orgánica de la Policía Judicial trata de esclarecer lo ocurrido. Este jueves acudieron al lugar del crimen para buscar junto al arcén elementos metálicos. Entre ellos, su teléfono móvil, que se encuentra desaparecido.
La escena del crimen se encuentra a la altura del kilómetro 37 de la carretera A-38, a la altura del municipio de Xeresa, tal y como avanzó este jueves Cope Gandia.
Aprietos económicos
Torró, de 62 años, fue alcalde de la ciudad por el Partido Popular entre 2011 y 2015. La ciudad decretó este jueves tres días de luto por el cruel asesinato de su ex primer edil.
En abril de 2023, como informó EL ESPAÑOL, la Justicia condenó a Torró a la pena de tres años y medio de prisión por un delito de malversación en la adjudicación de los servicios de comunicación audiovisual entre los años 2012 a 2015 en el consistorio, el llamado caso Tele7.
Fruto de este procedimiento, Torró había sufrido embargos que le habían dejado en una delicada situación económica, a pesar de los múltiples negocios que había montado.
El exalcalde tuvo varias empresas del sector funerario, entre ellas la fabricante de ataúdes Maderarte y Tableros Puixa SL. También fundó tanto el grupo óptico MasVisión como la empresa de tratamiento integral del agua Hidrosalud.
Alguna las iniciativas empresariales que impulsó fueron en el extranjero. En particular, en Argentina y en un país africano.
El exalcalde cerró la televisión municipal, Gandia TV, tras la histórica victoria del PP en las elecciones municipales de 2011 y la adjudicó a una empresa privada.
Arturo Torró, en una imagen de archivo. Efe / Natxo Francés
Torró acabó abonando años después 480.000 euros a la mercantil tras firmar un documento "sin que existiera cobertura legal para el pago", según concluyó el tribunal. La firma permitió a Torró "conseguir atender intereses particulares y no públicos".
Sobre el empresario, la sentencia dictó que "concurría la condición de autoridad o funcionario con facultad decisoria y capacidad para disponer de caudales públicos".
Arturo Torró había abandonado, en febrero de 2016, el cargo de presidente del PP de Gandía para "no generar polémica" y negaba entonces que su decisión estuviera motivada por su citación, al mes siguiente, como investigado por el cierre de la televisión municipal.
Torró, sin embargo, nunca cesó en su actividad pública. Fue de hecho el impulsor de la causa judicial que investigó al Ayuntamiento de su sucesora, la hoy ministra Diana Morant, por impedir un desahucio que, según denunciaba el PP, derivó en la okupación del edificio público al completo.
La justicia, sin embargo, archivó recientemente este proceso. Descartó la existencia de prevaricación tanto en las decisiones tanto de Morant como por parte del resto de su equipo municipal. También por parte del actual alcalde socialista, José Manuel Prieto.
