Valencia

La comunidad de propietarios ha escogido a Indexa. Mapfre, que es la aseguradora contratada por los vecinos del complejo residencial, a Intemac. Se trata de las dos firmas que peritarán el complejo residencial incendiado la semana pasada en Valencia. De sus conclusiones depende una decisión trascendental: la demolición o no del inmueble de 138 viviendas arrasado por las llamas, en el que murieron diez personas.

Según ha podido saber EL ESPAÑOL, Indexa es la compañía elegida por los residentes en su afán de contar con una auditoría completamente independiente, en la que no interfieran intereses de ningún tercero.

La mayoría de los propietarios del edificio abogan por, en caso de que lo avalen los técnicos, aprovechar la estructura y reformar el complejo residencial sin demolerlo. ¿La razón? Una declaración de ruina del inmueble abocaría a los propietarios a una situación mucho más lesiva para sus intereses económicos.

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Por ello, han preferido contar con un peritaje propio. En cualquier caso, la compañía aseguradora del complejo, Mapfre, ha contratado los servicios del Instituto Técnico de Materiales y Construcciones (Intemac).

Algunos vecinos han celebrado esta elección porque se trata de una firma considerada independiente y con experiencia en siniestros como el del Edificio España o el Windsor de Madrid.

Indexa, por su parte, es una compañía con oficinas en Madrid, Sevilla y Valencia, esta última ubicada muy cerca del edificio arrasado por las llamas.

Optimismo

Entre los siniestros más significativos en los que ha intervenido se encuentran el incendio de las instalaciones de Grupo Ybarra en Sevilla, Merkamueble en Granada, o las de Gourmet en Paterna, que ardieron en 2017. Esta última firma manifestó expresamente su agradecimiento por el trabajo de la empresa de peritaje.

En la junta de vecinos que tuvo lugar el pasado sábado, solo dos días después del brutal siniestro, la mayoría de los propietarios se mostraron partidarios de reconstruir con la estructura existente. Lo hicieron tras escuchar las consideraciones de Guillermo Aragó, abogado asociado a Loradmi, gestor de la comunidad, que acudió a asesorar a los dueños de las viviendas en las posibles implicaciones jurídicas.

Según arquitectos consultados por este periódico, el tiempo total de duración del incendio puede resultar determinante para que sea posible aprovechar la estructura y evitar la demolición. El de Campanar se prolongó unas 16 horas, lejos de las 48 que duró en 2005 el incendio de la mencionada torre Windsor.

La naturaleza del incendio, que se propagó por la fachada y no desde el interior, y la rápida intervención de los bomberos, que intervinieron con muchísima rapidez para sofocarlo, son argumentos que alimentan el optimismo.

Detalle de la estructura del edificio. Efe / Manuel Bruque

También el estado en el que se encuentra la parte inferior del complejo. Los tres sótanos que conforman el aparcamiento se encuentran intactos. Tanto es así que los vecinos que conservaban la llave de su vehículo -a muchos se les ha quemado junto a su vivienda- ya han podido retirar sus coches

También resulta llamativo buen estado de los bajos comerciales, tanto de la tienda de Tedi como del concesionario de BYD. En el interior de este último luce un vehículo de exposición con los faros encendidos, presumiblemente, por la batería del propio coche eléctrico.

No obstante, también hay voces pesimistas, tanto entre los vecinos como externas. Lucía Aguirre de Cárcer, perito judicial de Aguirre & Baeza, manifestó en declaraciones a Telecinco que"habría que demolerlo y volver a construir un edificio nuevo, porque está totalmente en ruinas".

Si se produce este escenario, los propietarios se verán en un apuro mayor, porque el único bien inmueble que conservarían sería su edificabilidad en el suelo residencial. Podrían recibir una cantidad mayor del seguro, pero, aunque esto ocurriera, perder dinero por el incremento de los costes de edificar desde cero.

Hipotecas aplazadas

Más allá de seguros y peritaje, buena parte de los vecinos se ha llevado una pequeña alegría esta semana. Banco Santander, el banco con más clientes en el complejo residencial incendiado en Valencia, está llamando a los propietarios para comunicarles "una moratoria automática en el pago de las hipotecas".

Se trata de seis meses en los que los afectados por el fuego no tendrán que pagar ni la cuota ni los intereses de la misma.

Así lo confirman a EL ESPAÑOL tanto propietarios de las viviendas como la propia entidad financiera. "Desde el primer día, el banco se ha puesto en contacto con los clientes para informarles de esta medida", expone Santander.

Se trata de la entidad con más clientes en el inmueble de 138 viviendas (más de 50, según detalla) porque heredó el negocio de Banco Popular. La extinta firma fue la que se quedó y comercializó los pisos a través de la inmobiliaria Aliseda tras la quiebra de la promotora del complejo, Fbex.

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En la misma línea, el grupo ha decidido "adelantar cantidades" a los clientes que tienen contratados seguros con la entidad. Inicialmente, brindó a todos sus asegurados 3.000 euros para los que necesitaran liquidez.

En la misma línea, se encuentra ahora tramitando el pago por adelantado de la cantidad correspondiente al contenido asegurado, a cuenta de la totalidad que les brinde finalmente -cuando se evalúe también el valor del continente-. 

La decisión de la entidad financiera supone un "alivio inmediato", según los propietarios consultados, mientras acceden a las ayudas articuladas por el Ayuntamiento de Valencia, la Generalitat Valenciana y el Gobierno de España.