Ford Almussafes hará despidos para afrontar los tres años de espera hasta la llegada de nueva carga de trabajo. La dirección de la compañía "ha convocado el inicio del periodo de consultas para negociar un ERE el próximo 28 de mayo", según reveló este miércoles UGT, sindicato mayoritario del comité de empresa. La empresa no precisa cifra de afectados por el momento.
Se trata de la consecuencia de la nueva organización productiva revelada la semana pasada por el vicepresidente europeo de la compañía, Kieran Cahill. La factoría española va a recibir un importante encargo, el ensamblado de un coche que "alcanzará la cifra de 300.000 unidades al año".
El problema del anuncio es que el lanzamiento del nuevo coche al mercado se producirá "a mediados de 2027". Es decir: dentro de tres años, de modo que la industria valenciana se enfrentará a un largo valle productivo durante los próximos ejercicios, con un excedente de personal de alrededor de mil trabajadores.
La propia UGT advirtió tras escuchar el anuncio que "esto no lo resuelve todo". "Ahora habrá que abordar el tema del empleo", dijo. Ford toma ahora la delantera al proponer directamente despidos mediante un nuevo ERE.
Había fórmulas alternativas sobre la mesa. La propia organización sindical había solicitado al Gobierno de España que active su denominado Mecanismo RED de Flexibilidad y Estabilización del Empleo para salvaguardar el empleo hasta que llegue el encargo. CCOO se sumó a esta demanda, pero la pidió para el conjunto del sector del automóvil.
Se trata de un instrumento excepcional, que debe ser aprobado por el Consejo de Ministros. Ya fue habilitado para auxiliar al sector de las agencias de viaje durante la pandemia, pero no ha sido desplegado hasta la fecha para sostener a ninguna industria. Además, no se dirige de forma expresa a compañías concretas, sino a sectores.
Es una suerte de expediente de regulación de empleo con ventajas añadidas para empresa y empleados. La fundamental, que no se consumen días de desempleo, como sí ocurre con los ERTE convencionales. Por ello representa un coste adicional para el Estado.
Pero Ford, o no confía en que esta fórmula vaya a aplicarse, o no la considera suficiente para solucionar su excedente de personal, de modo que ha decidido impulsar un nuevo ERE.
El cambio organizativo de Ford, tal y como explicó este miércoles UGT en su escrito, también implica que la compañía haya hecho pública "su renuncia al PERTE del automóvil eléctrico". Lo ha hecho "argumentando que no podrá cumplir los plazos
que exige dicho plan".
"Es una evidencia que los plazos de Ford son otros, habida cuenta del retraso que experimenta la electrificación en Europa, y los estudios de mercado realizados", afirmó la organización sindical.
El nuevo coche
Sobre el nuevo vehículo que se adjudicará la factoría, UGT explicó que "no será eléctrico 100%, pero en términos globales de carga de trabajo y empleo garantizará niveles superiores a lo que supondría a día de hoy una plataforma eléctrica".
La llegada de este volumen de 300.000 vehículos anuales podría llegar a triplicar la producción actual de la industria. En la actualidad, Almussafes solo ensambla el Ford Kuga, del que en 2023 se fabricaron algo menos de 150.000 unidades.
Será "un vehículo totalmente nuevo", precisaron, sin ofrecer más detalles sobre el mismo. La necesidad de escoger el coche por el que se apuesta y diseñarlo desde cero retrasarán su llegada al mercado.
La fábrica tiene en vigor hasta el 20 de junio un nuevo Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) que durante varios días afectará a 2.300 trabajadores -su excedente estructural de mil y más de un millar adicional por otras causas productivas como el desabastecimiento de componentes. Los descansos forzosos afectan al 48% de la plantilla.
Tras el cese de producción de la furgoneta Connect, la fábrica valenciana solo produce ahora el Kuga. Por ello, el pasado 27 de marzo el presidente global de Ford, Jim Farley, se comprometió a asignar a la fábrica valenciana la producción de un "vehículo de pasajeros multinenergía".
Cabe recordar que esta apuesta supone un giro respecto a la anunciada en verano de 2022, cuando Ford, tal y como avanzó EL ESPAÑOL-Invertia, anunció una nueva plataforma para Almussafes para fabricar dos coches 100% eléctricos. Ahora ha decidido continuar con los híbridos ante el escaso brío de la demanda de los eléctricos.