El PSOE valenciano ha roto el consenso que existía entre los partidos (a excepción de Vox), la patronal y los sindicatos en la plataforma por la financiación justa al renunciar a reclamar al Gobierno central el fondo de nivelación transitorio. 

Los integrantes de la plataforma hasta ahora estaban de acuerdo sobre la exigencia de este fondo que iguale los recursos que percibe la Comunitat Valenciana a la media nacional. De hecho, fue una de las peticiones principales del anterior presidente valenciano, el socialista Ximo Puig.

Tras la reunión de este viernes, el portavoz parlamentario del grupo socialista, José Muñoz, fue el encargado de explicar el cambio de postura. Afirmó que hay que adaptar las peticiones al "nuevo escenario" estatal en materia de financiación.

En este sentido, aseguró que su partido ha pedido reformular las reivindicaciones "a la nueva pantalla en la que no todo el mundo está de acuerdo". 

Además, señaló que se están planteando "muchos fondos de nivelación", como uno de 700 millones para Galicia, con el que no está de acuerdo al ser una comunidad "sobrefinanciada". Explicó que "el problema" no es el propio fondo, sino "adaptar los documentos a las nuevas circunstancias".

Rechazó al respecto que su formación política haya roto "ningún tipo de consenso" porque la plataforma sigue estando de acuerdo en "la cuestión fundamental", que es la reforma del sistema de reparto.

Un paso atrás

Desde el Partido Popular, el secretario general y síndic en las Cortes Valencianas, Juanfran Pérez Llorca, subrayó que su partido apoya el acuerdo de mínimos que se alcanzó en noviembre, con tres exigencias: la reforma del propio sistema, el fondo de nivelación y la condonación de la deuda.

"No le hemos puesto ninguna pega", defendió, al tiempo que lamentó que la plataforma haya dado "un paso atrás".  

Sobre la deuda, reiteró que la postura del PP es priorizar la reforma y el fondo de nivelación, pero sin renunciar "a que después se pueda hacer la condonación". "El PP y el presidente (Carlos Mazón) no van a renunciar a nada que beneficie a la sociedad valenciana", subrayó.

Compromís, por su parte, exigió a ambos partidos que defiendan los intereses valencianos. "A nosotros no nos gobiernan desde Madrid", defendió la portavoz de la coalición en el Congreso de los Diputados, Àgueda Micó.

Como presidente de la CEV, Salvador Navarro, reconoció estar decepcionado con el resultado de la reunión al "perder una oportunidad" de que Mazón vaya a la Moncloa a su reunión con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, de la próxima semana "con un respaldo de la plataforma". 

Navarro apeló a la "responsabilidad" de los partidos, ya que considera que "si el PP y el PSOE nacional quisieran ponerse de acuerdo" en financiación "con visión de estado" serían capaces. 

Entre los sindicatos, Ana García (CCOO PV) apeló al consenso y negó que el debate de la financiación sea "una guerra entre comunidades". Ismael Sáez (UGT-PV) consideró que es a los partidos a quienes les corresponde definir el nuevo modelo.

En cualquier caso, sindicatos, patronal y partidos acordaron volver a reunirse en octubre para plantear posibles acciones durante noviembre, cuando se cumplen siete años de la constitución de la plataforma y de la manifestación que tuvo lugar en 2017 por la financiación.