La costa valenciana atrae cada vez a más turistas a sus playas. Repleto de lugares de ensueño todavía quedan sitios sin descubrir que son ideales para visitar en la época estival.
La calidad de sus playas es indiscutible. Con 37 playas reconocidas con Bandera Azul en la provincia de Valencia, está garantizada la calidad del agua, su positivo impacto medioambiental y la seguridad en todo su recorrido.
Pese a ello, encontrar un lugar en el que disfrutar de las vacaciones que no esté muy masificado es algo que se ha dificultado con el paso del tiempo y el aumento de la popularidad del litoral valenciano.
Una de las playas que cumple con ambos requisitos, es decir, tener una calidad óptima del agua y una seguridad tanto ambiental como para el baño, es la Playa de Miramar.
La playa es una de las más seguras del país gracias a los reconocimientos que ha recibido. Cuenta con una longitud de un kilómetro y medio y con un aparcamiento de 100 plazas habilitado para los visitantes.
La Bandera Azul que ondea la Playa de Miramar es una garantía que, junto con este reconocimiento, la convierte en una opción segura y muy poco conocida. Esta distinción asegura la calidad óptima de las aguas para el baño y de las instalaciones y servicios con los que cuenta.
Pese a estar muy próxima a la Playa de Gandía, una de las más visitadas por los turistas en la provincia de Valencia, la Playa de Miramar puede presumir de ser una de las joyas del litoral valenciano dada su poca masificación y sus excepcionales condiciones naturales.
En el recorrido de su paseo marítimo se puede observar, al sur de la costa, el Montgó y, al norte, el Puerto de Gandía y el faro de Cullera. En este tramo hay una amplia oferta de cafeterías, terrazas, heladerías y restaurantes. Además, es una zona en la que se organizan diferentes actividades como conciertos, actividades deportivas, cine de verano o mercadillos tradicionales.
Actividades y gastronomía
Su atractivo costero no es lo único que sobresale en este municipio valenciano. Miramar es un reclamo por sus entornos idóneos para realizar salidas y rutas en bicicleta. Recorridos que permiten descubrir la Vía Verde entre Gandía y Oliva o a entrar en rutas turísticas, como la del Sendero Azul de la Séquia Mare.
Se trata de una ruta circular de unos tres kilómetros que parten de la Oficina de Turismo de la playa y permiten observar tanto el paisaje típico de la huerta mediterránea como la flora y fauna de las zonas húmedas. Además, el Sendero Azul de la Séquia Mare está adaptado para las personas con movilidad reducida.
En cuanto a la gastronomía, la influencia mediterránea es innegable en toda la localidad al igual que en toda la Comunitat Valenciana. Sin embargo, en Miramar se encuentran platos típicos de mucho renombre como el polp farcit o la coca borratxa.
El polp farcit es en un plato que lleva elaborándose generación tras generación con pulpo fresco, arroz, ajos secos, azafrán, perejil, piñones, patatas, judías, pencas, sal y aceite. Además, es el gran protagonista de las Jornadas Gastronómicas celebradas en el municipio en el mes de febrero.