Si por algo se caracteriza la gastronomía valenciana es por tener un carácter variado y muy saludable típico de la cocina mediterránea. En muchas dietas, los platos del litoral y de toda la Comunitat Valenciana son algunos de los más requeridos por su valor nutritivo y creativo.

Y es que la dieta mediterránea no solo se caracteriza por la paella y el arroz. Su gastronomía incluye muchos otros platos tradicionales en los que los productos locales son la joya de la corona en creaciones culinarias como el esgarraet, el all i pebre o la titaina. Y, entre ellos, un ejemplo más es también el clásico hervido valenciano.

Este sencillo plato es conocido popularmente en la Comunitat Valenciana como el bollit valencià. Su excepcional sabor y su valor como plato de la gastronomía valenciana reside en que está elaborado con productos locales procedentes de la huerta valenciana.

Además, se trata de un plato ideal para todas las épocas del año y muy recurrido en cualquier ocasión, tanto en días fríos de lluvia en invierno, como en los días más calurosos del verano al ser una opción nutritiva que se puede tomar en frío y en caliente.

Las verduras utilizadas para su elaboración hacen que este plato contenga un componente saludable muy destacable. En concreto, los ingredientes más utilizados habitualmente suelen ser las patatas, las judías verdes, la cebolla o las zanahorias. Sin embargo, como toda receta, también está sujeta a variaciones.

En este sentido, este plato admite añadir otros ingredientes sin perder su esencia saludable y mediterránea a partir de verduras como las alcachofas, la coliflor o los nabos, según la época del año en la que se prepare. 

Pero si hay algo que no puede faltar en un plato valenciano es el aceite de oliva virgen extra, uno de los principales baluartes de la cocina mediterránea que aporta mucho cuerpo y sabor a la composición, y que, junto con una pizca de sal, completa este plato sencillo, saludable y valenciano.

Además, es habitual acompañar el tradicional bollit valencià con otros platos que complementan a la perfección el sabor. De entre todas las posibilidades destaca especialmente la combinación entre hervido y carne, popularmente reconocida como bollit i carn torrà.

Preparación

1.  En primer lugar, se debe quitar las puntas a las judías verdes y los hilos del lateral con la ayuda de un pelador. Tras preparar las judías se pelan las ocho patatas medianas, las cuatro zanahorias y las dos cebollas. Una vez preparadas, se introducen todos los ingredientes en un bol de agua durante unos minutos.

2.  Tras escurrir el agua y enjuagar bien los vegetales, se pone agua en una olla a fuego medio-alto. Una vez empiece a hervir se añaden las judías y las zanahorias. Cinco minutos más tarde se añaden las patatas y las cebollas. Estos últimos ingredientes pueden estar cortados en piezas para favorecer su cocción.

3.  Tras añadir todos los ingredientes, se deja cocer todo el conjunto durante 30 minutos. Antes de finalizar la cocción, es recomendable pinchar la patata con la ayuda de un cuchillo para ver si está bien cocida.

4.  Una vez cocidos los ingredientes, se retiran del agua de cocción. El caldo generado en muchas ocasiones se guarda para otras elaboraciones dado su gran valor nutritivo.
5.  Para terminar, se debe servir el hervido valenciano con todas las verduras cocidas y preparadas en un plato con la patata y la zanahoria troceada. Por último, se debe añadir la sal y el aceite para aportar el toque más importante que le aporta su sabor definitivo.