Hay ciertos lugares en el mundo que tienen un sello identificador por naturaleza. Egipto y sus pirámides. México y el tequila. Francia y la gastronomía. Pues bien, hay una ciudad en el mundo que se asocia de forma automática con la música.
Se trata de Nueva Orleans, una ciudad que todavía mantiene la esencia del jazz, pero… ¿con qué riegas la buena música? Te invitamos a que entres en calor en los mejores bares de la ciudad. No apto para las personas aburridas.
Puede marear, pero lo cierto es que pocas veces en tu vida vas a poder tomarte un copa en un carrusel en movimiento. Y así se lleva haciendo desde 1949, en el Carousel Bar & Lounge del hotel Monteleone. Si eres de los duros, opta por el Vieux Carré, elaborado a base de coñac y vermut. Y admítelo, no te tomas un trago todos los días en un carrusel.
Existe una significante diferencia entre un bar y un cocktail bar. Los mejores cócteles de Nueva Orleans están en Cure, un lugar para hacerte a la idea de que perderás la conciencia poco a poco (sin dejar de disfrutar). Visita Cure y dinos que estábamos equivocados.
Cuando se trata de tomar un trago, parece que un hotel invita poco a traspasar sus puertas, pero plantéate hacer una excepción y asómate al The Hotel Modern New Orleans, donde Kirk Estopinal y Matthew Kohnke han preparado lo que podemos definir como un parque de atracciones para el gusto del buen bebedor en su bar Bellocq.
Frenchemen Street es famosa por la cantidad de clubes jazzeros que reúne. Entre ellos se encuentra Three Muses, que además de tener los mejores conciertos de bandas locales de jazz, tienen un menú–creado por el chef Daniel Esses– que honra la gastronomía de la ciudad.
Irvin Mayfield's Jazz Playhouse
¿Qué mejor que disfrutar de un cóctel preparado al ritmo del jazz? Sólo te piden una cosa: sé puntual. A las 20:00 comienza la música de la mano de Irvin Mayfield y Royal Sonesta. ¿No sabes quiénes son? Deberes para ya.
Si es una noche de celebración, entonces deberías pasarte por este bar. Ocho inolvidables salas inspiradas en los mejores lugares y momentos históricos de la ciudad de Nueva Orleans. Además tiene la mejor comida y bebida criolla.
Hemos estado en lugares antiguos, pero pocos tienen el currículo de Café du monde. Se inauguró en 1862 y a día de hoy abren las veinticuatro horas del día. Su especialidad es el café solo, preparado de la forma más natural, y nuestra recomendación es que le añadas un poco de achicoria.