Mil doscientos noventa kilómetros de costa (parte en el Caribe) parece suficiente razón como para querer pasar las vacaciones en Costa Rica, pero este país ofrece mucho más que sol y playa. Acoge a medio millón de las especies del mundo, tiene misterios prehispánicos todavía sin resolver y acoge los mejores bosques del Caribe.
Maravillas esféricas
En 2014, la Unesco declaró Patrimonio de la Humanidad el asentamiento de las quinientas petroesferas encontradas en el delta del Diquís, en la costa de Pacífico de Costa Rica. Símbolo nacional del país, se conocen localmente como las bolas de Costa Rica y son únicas en el mundo por su número, tamaño y perfección.
De ellas se han dicho que son restos de la Atlántida, u obra de gigantes o alienígenas. Fueron encontradas entre el año 500 y 1500 por los pueblos borucas. Se sabe que las tallaron con piedra, pero se ignora cómo las movieron, ya que pesan casi 25 toneladas.
Parque Nacional Tortuguero
Este parque es el área con más variedad biológica y está situado en una de las regiones más ricas en flora (más de 400 especies de árboles y alrededor de 2.200 especies de otras plantas) y fauna de Costa Rica. Jaguares, manigordos, dantas (que es el animal más grande de las selvas tropicales de América), el manatí, el tolomuco, el perezoso, cocodrilos y 405 especies de aves.
Pero lo más increíble es la variedad de especies de tortugas que puedes encontrar. Las que más te vas a encontrar son la tortuga baula y la carey. Puedes hacer un tour de dos días y ver como anidan estos animales.
Río Celeste
Lo puedes encontrar en el Parque Nacional Volcán Tenorio, situado en la cordillera de Guanacaste, al noroeste del país. Su superficie abarca 18.402.51 hectáreas de bosques y se encuentra el volcán Tenorio y el famoso río Celeste, la gran atracción turística y que se llama así por su color peculiar gracias a un efecto óptico producido por la dispersión de la luz solar debido a la alta concentración de silicatos de aluminio que poseen sus aguas. Cerca de este sitio, se encuentra Los Hervideros, un lugar con aguas termales. Parada obligatoria.
Osos perezosos
Cahuita es un sitio perfecto para pasar unos días entre playas de ensueño, Parques Nacionales… y ver osos perezosos. Vive casi todo el tiempo en las copas de los árboles y sólo baja cuando es su hora de ir al baño.
En Cahuita podrás ir al Sloth Sanctuary, (o santuario perezoso) y tomar un tour guiado para conocer más sobre los osos perezosos. Puedes además pernoctar en el sitio.
Refugio Nacional de Vida Silvestre Barú
Creado el 6 de octubre de 1995 con el fin de proteger las áreas de bosques tropicales en la costa del Pacífico, este es un refugio de vida silvestre privado, con bosques, pantanos, ríos y playas.
En el bosque tropical puedes encontrar boas colgadas de los árboles y pumas entre los senderos. Hay más de 310 especias de aves, 57 especies de mamíferos, y cientos de reptiles y anfibios. Las ballenas jorobadas son fáciles de observar en alta mar a partir de septiembre hasta el mes de abril.
Esta hacienda privada tiene además un vivero donde nacen cerca de 2.500 tortugas.
Parque Nacional Chirripó
El cerro Chirripó es punto más alto de Costa Rica con 3.820 metros de altura sobre nivel del mar. Desde su cumbre, es posible apreciar el Oceano Pacífico y el Mar Caribe. En el mismo parque se encuentran “Los Crestones”, declarados como nuevos símbolos patrios.
121 Volcanes
Repartidos por todo el país, siete de estos ciento veintiún volcanes están activos. Si no tenemos demasiado tiempo para ver todos (algo casi imposible), el que más impresión causa es el volcán Arenal. Tiene unos 1.670 metros de altura y se encuentra en el distrito de La Fortuna, en la provincia de Alajuela.