Bután tiene muchas actividades disponibles para aquellos visitantes que buscan un lugar de consuelo, descanso y recuperación. Ya se trate de una sesión de relajación a orillas del Pacífico, de una jornada de meditación contemplativa, de un relajante baño termal mineral o formando parte viva de alguno de los festivales tradicionales, Bután tiene justo lo que el turista necesita para revivir y rejuvenecer el cuerpo y el espíritu.
Tres zonas diferenciadas
Bután oriental es una de las regiones menos exploradas del reino y ofrece una de las experiencias más auténticas para los turistas. Toda la región está inundada de belleza natural intacta, imponentes acantilados y bosques vírgenes con grandes variaciones de altitud y condiciones climáticas.
Además de los festivales budistas regulares, los viajeros a Bután oriental podrán experimentar las prácticas espirituales más antiguas del país o bien observar alguno de los rituales religiosos animistas.
Los exuberantes entornos de la región oriental lo convierten en un lugar ideal para viajes largos. Los alojamientos en esta zona rural son un poco más espartanos que en otras partes del país, pero siempre tendremos la opción de acampar bajo un océano de estrellas o de experimentar el calor desenfrenado y la hospitalidad de los lugareños durante una estancia en familia.
El circuito del Este incluye los distritos de Mongar, Lhuntse, Tashi Yangtse, Tashigang y Samdrup Jongkhar.
Bután Central es un destino maravilloso para todos los visitantes. Incluye algunos de los sitios históricos y religiosos más importantes del país. El distrito de Trongsa siempre ha sido de gran importancia política para los líderes de Bután debido a su situación privilegiada en el centro de la nación, mientras que el distrito de Bumthang tiene algunos de los templos y monasterios más antiguos e importantes de Bután.
Algunos de los hitos importantes del centro de Bután son Kurje Lhakhang, construido en 1652 en el lugar donde el gran santo budista Guru Rimpoche meditó; Tamshing Lhakhang, el gran revelador de tesoros religiosos Terton Pema Lingpa construcción que data de 1501; y Mebar Tsho, un lago sagrado de la que Terton Pema Lingpa descubrió tesoros religiosos ocultos por Guru Rimpoche.
Imagen aérea de la cordillera del Himalaya.
La Atalaya de Trongsa Museum: esta antigua torre se ha convertido en un museo dedicado a la dinastía Wangchuck y ofrece a los visitantes una visión sin precedentes en la historia política de Bután.
Chendebji Chorten: Un edificio religioso interesante cuya leyenda dice que fue construido para someter a los restos de un espíritu maligno que se manifiesta como una serpiente gigantesca. Además de las fiestas religiosas anuales tradicionales (Tshechus) también hay muchos festivales relativamente nuevos que muestran las ricas tradiciones de la región como el Festival de la Nomad anual y el Festival Mushroom Matsutake en Ura, Bumthang.
El circuito occidental comprende los seis distritos occidentales del país que incluye Thimphu, Paro, Haa, Wangdue Phodrang, Punakha y Gasa. En este circuito se puede asistir a la fiesta de verano de Haa y profundizar en las maravillas de la antigua cultura viva de los Haaps (Gente de Haa). El festival pone de relieve los rituales chamánicos y otras danzas populares.
En Thimphu se puede presenciar el Festival Takin de reciente introducción, MICE y conferencias FNB, la meditación y las instalaciones de bienestar. También puede visitar los templos, dzongs (fortalezas) y museos o asistir a un festival de textil que da vida a la rica cultura de la tejeduría de Bután.
Especialmente llamativo es el festival Punakha Tsechu, donde se recrea la leyenda histórica de los guerreros medievales butaneses que defendieron Bután con espadas y escudos.
Amantes del trekking
Los amantes de la Naturaleza encontrarán en Bután un auténtico paraíso: lagos de aguas cristalinas, imponentes glaciares o algunas de las especies animales más amenazadas del mundo te esperan en el anfiteatro montañoso de la cordillera del Himalaya. Estas son algunas de las muchas rutas que ofrece este bello país.
6 días - Sendero Druk Trek
Es la ruta más popular en el país y transcurre por un majestusoso y sencillo paisaje natural de bosques de pinos, altas cumbres azules y lagos limpios, mientras que al mismo tiempo que ofrece la oportunidad de visitar aldeas y pueblos del Bután más recóndito.
12 días - Jomolhari Gasa Trek
La ruta Laya-Gasa es considerada una de las más espectaculares en Bután, pues ofrece impresionantes vistas de algunos de los bosques vírgenes en Bután. Son 217 kilómetros que comienzan en Drukgyel.
7 días - Jomolhari Loop
Jomolhari Loop es la más corta de las rutas de trekking. Con diferencias de altitud de 2.500 metros, ofrece una amplia gama de paisajes, fauna y flora. El punto culminante de esta ruta es la espectacular vista del Monte Jomolhar.
9 días - Jomolhari Trek
Jomolhari Trek es más larga que el Jomolhari Loop - las rutas de trekking más populares en Bután. El punto culminante de esta caminata es la espectacular vista del Monte Jomolhari desde Jomolhari Basec.
Un país lleno de Parques Naturales
A pesar de su pequeña masa de tierra, Bután tiene una notable abundancia de flora y fauna y es una de las regiones con mayor diversidad biológica del mundo.
El terreno es muy accidentado y hay grandes variaciones de altitud. Las regiones del norte del país tienen como principal atractivo las montañas nevadas y los glaciares, pero podemos disfrutar desde los bosques de coníferas a los bosques de hoja ancha en la región central y densos bosques subtropicales en el sur.
Osos en libertad en uno de los parques naturales de Bután.
Esta amplia gama de condiciones climáticas permite una variedad incomparable de vegetación y de vida silvestre. Además, el hábitat de estos animales ha sido bien protegido gracias a los esfuerzos del gobierno y el pueblo.
Como parte de los esfuerzos de conservación la política oficial del país indica que el 60% de la superficie del país debe permanecer boscoso, aunque actualmente cuenta con una cobertura boscosa alrededor del 72%. Los pandas rojos, ciervos el raspar, el langur dorado, tigres de Bengala, Takins, ovejas y osos negros del Himalaya son sólo algunos de los muchos animales raros y exóticos que se pueden ver en Bután.
El reino es también un punto de acceso ornitológico con cientos de aves raras también en peligro de extinción y que habitan en sus frondosos bosques, siendo la principal atracción la grulla de cuello negro, todo un icono turístico de Bután.
Real Parque Nacional de Manas
Este parque ha sido recientemente abierto al público y ofrece miles de especies animales y vegetales, muchas de las cuales están en peligro de extinción a nivel mundial, no sólo es el área protegida más diversa en Bután.
Situada en el centro sur de Bután, Manas está conectado en la frontera sur con la reserva de tigres de India Manas, Patrimonio de la Humanidad. Al norte limita con el Parque Nacional Jigme Singye Wangchuck. Royal Manas fue designado un santuario de vida silvestre en el año 1966 por lo que es el área protegida más antigua de Bután. La zona pasó a ser un parque nacional en 1993.
Más de 365 especies de aves han sido registradas oficialmente en el Real Parque Nacional de Manas, entre las que encontraremos sin dificultad la garza de vientre blanco o el reyezuelo. Además, en este parque hay más de 900 tipos de plantas con propiedades medicinales milenarias.
Parque Nacional Trumshingla
Situado en el corazón del país, cubre 768 kilómetros cuadrados; fue inaugurado oficialmente en julio de 1998. El parque fue noticia en el año 2000 cuando un equipo de estudio apoyado por WWF capturó una imagen de un tigre a 3000 metros de altitud, la primera evidencia fotográfica de que estos magníficos animales se adaptan a alturas tan poco favorables para ellos. Además, el parque cuenta con 341 especies de aves por lo que es un verdadero paraíso para los observadores de aves.