La última etapa de la Edad Media queda coronada en Europa con un halo de esplendor y gloria. Las Cruzadas y los contactos con Oriente crean rutas comerciales, facilitan el nacimiento de la burguesía y la aparición de núcleos urbanos. Las ciudades necesitan un símbolo majestuoso que las identifique y las construcciones góticas son su gran orgullo. Catedrales que buscan la luz más elevada y se alzan al cielo para tratar de rozar las estrellas.

La bella evolución de la arquitectura románica

El origen del magnífico arte gótico se sitúa muy cerca de París, en Saint Denis. Como es habitual, la construcción se realiza sobre otras anteriores erigidas a partir del siglo V. Fue el abad Suger, en el siglo XI, quien restauró la vieja iglesia para convertirla en centro espiritual de Francia y templo de peregrinación. La primera piedra de un modo de construcción que, con su arco apuntado y su bóveda de crucería, extendió por toda Europa la verticalidad del arte gótico. Las iglesias aplastantes y oscuras se pierden en la historia. El poderoso abad Suger pretende que las iglesias se conviertan en templos de luz y su arquitecto revoluciona la arquitectura medieval. Basílica, catedral y abadía se convierte, desde su nacimiento, en necrópolis real y dinástica de los monarcas franceses. Actualmente, el barrio no goza del poder económico y la elegancia de tiempos pasados. 

Notre Dame París

Dedicada a la Virgen María, la catedral parisina es uno de los edificios góticos más antiguos del mundo. Las dos torres de su fachada, con 69 metros de altura, ofrecen unas magníficas vistas de la capital francesa. 387 empinados escalones conducen a la cima, desde donde se contemplan las temibles gárgolas y es posible acceder al célebre campanario, en el que habitaba su mítico jorobado. Actualmente, tras el incendio del pasado mes de abril que destruyó su tejado y su inconfundible aguja, la catedral permanece cerrada al público

Asombroso pórtico de la catedral de Amiens.

Una de las catedrales góticas francesas mejor conservadas es la de Amiens. Como muchas otras está consagrada a la Virgen María y es famosa, fundamentalmente, por las esculturas de sus pórticos. Pero, a finales del siglo XII Chartres inaugura el nuevo estilo gótico. 5.000 figuras trepan por sus pórticos y sus vidrieras le aportan una espectacular luminosidad. Ni el genial abad Suger habría podido soñar con la divinidad de su luz. La armonía de Chartres se exporta a toda Europa. Algunos otros detalles curiosos también recorren los templos europeos.

Gótico francés en España

Hablar de luz incita a quedarse en España. La armonía de Chartres tiene una gran competencia en León. La Pulchra Leonina consigue hacer realidad la desmaterialización de los muros convirtiéndolos en vidrio. La increíble luminosidad de sus 1.800 metros cuadrados de vidrieras hacen perceptible “el sueño de la luz”.  Una luz que se distribuye por todo el templo y se filtra en colores. Tan increíble como el juego luminoso de sus tres rosetones, uno de ellos, con ocho metros de diámetro, tiene leyenda incorporada. 

Majestuosa catedral de Burgos.

Los expertos canteros del gótico dejaron otras huellas visibles para el buen observador. Los cultos paganos se colaron en la catedral de León con unos pétreos hombre verdes, presentes en el arte medieval de todo el oriente europeo. Un interesante tema de charla para compartir frente a unos vinos por el barrio gótico leonés o por la calle Sombrerería de Burgos, cercana a otro magnífico templo. La catedral de Burgos fue la primera representación en España de la arquitectura gótica clásica. Al igual que las anteriores, el templo está consagrado a la Virgen. Las cuatro rosetas ovales de esta catedral están compuestas por vidrios medievales recuperados. 

Son un puñado de catedrales en las que se detectan guiños alquímicos, paganos, telúricos o la increíble precisión geométrica y el gran conocimiento que encierra la construcción de estos increíbles y hermosísimos gigantes de piedra. 

Brujas, toda una ciudad gótica

El sorprendente gótico tiene un curioso exponente en una ciudad belga. El casco histórico de Brujas revive fielmente la época medieval de la construcción de su catedral. San Salvador fue el primer templo construido en ladrillo y alberga tapices y pinturas de artistas flamencos. Las edificaciones de estilo gótico, del centro de la ciudad, pueden acercarnos a la curva de río Djiver para vigilar los muelles en los que se cargaban los famosos paños de Bruselas. Aunque, antes de embarcar las mercancías nunca viene mal una buena cerveza trapense

Espectacular vista del puente Hohenzollern y la catedral de Colonia.

Alemania

Los alemanes saben mucho de cerveza y Colonia es la ciudad con más pubs y tabernas por habitante de toda Alemania. Pero, además de cruzar el puente Hohenzollern y pelearse visualmente con los más extravagantes candados dejados por los enamorados, Colonia posee una impresionante catedral gótica. La más grande del norte de Europa se alza a orillas del Rin. Sus 157 metros de altura la convirtieron en el edificio más alto del mundo, hasta finales del siglo XVIII. De estilo gótico puro, Kölner Dom, posee una nave central de una verticalidad desmesurada y sus vitrales filtran las escasa luminosidad del norte europeo. Supuestamente, en su interior de conservan los restos de los tres Reyes Magos.

Interior de la catedral de Aquisgrán, en Alemania.

Catedral de Aquisgrán

Mantiene el resplandor del imperio de Carlomagno. Al norte de Alemania, en el valle del Rin, nace la arquitectura carolingia. La catedral de Aquisgrán es la obra religiosa más antigua del norte de Europa. Su origen se remonta a la capilla del palacio del emperador Carlomagno. Su magnífica decoración con mármol, bronce y mosaicos finos resulta espectacular. Sus torres góticas, de agujas afiladas, se acompañan con diferentes estilos de construcción formando un bellísimo e impactante conjunto, declarado Patrimonio de la Humanidad por al Unesco.

Goethe, padre del romanticismo alemán dijo que “la belleza es una manifestación de las leyes naturales secretas, que de otro modo nos habrían sido escondidas para siempre”. Parece definir el arte gótico.

Catedral de Canterbury

El gótico inglés tiene un magnífico ejemplo en Canterbury. Su planta es muy alargada, de tres naves con doble transepto. Utiliza arbotantes, aunque los contrafuertes no son demasiado importantes. Es el edificio central de la arquitectura anglicana británica y sede del arzobispo de Canterbury, primado de toda Inglaterra. Se encuentra en el corazón de la ciudad. El edificio actual se inició a finales del siglo XI, poco antes de la invasión normanda. Curiosamente, es el mismo tipo de piedra utilizada en la catedral de Norwich. Los monjes benedictinos fueron quienes se ocuparon de la construcción de esta catedral ubicada en la capital del condado de Norfolk. El interior del templo está edificado en estilo normando y su claustro monástico es el más grande de Inglaterra. La ciudad, aunque moderna y con una intensa vida cultural, sigue conservando su antigua esencia medieval. 

Los misterios del gótico se han convertido en hermosa leyenda para curiosos e incentivo de búsqueda para visitantes atrevidos. La impresionante belleza, de estas magníficas y elevadas construcciones, oculta secretos que apuntan a las estrellas y el firmamento.