Su característica fachada marítima de casas blancas y el extraordinario paisaje de olivos y paredes de piedra seca que lo rodea, confiere a Cadaqués una particular belleza y singularidad que se transmite a través del carácter acogedor de su gente. Su historia se remonta a miles de años atrás y al cincel de muchas culturas y pueblos como los iberos, los etruscos, los egipcios, los griegos y los romanos.
Inspiración para pintores y poetas
Muchos poetas, pintores, intelectuales, escritores de renombre,... como Picasso, García Lorca, Josep Pla, Salvador Dalí... Todos quedaron fascinados por este maravilloso paisaje cadaquesenc que en muchas ocasiones se refleja en sus obras, dándole un prestigio dentro y fuera de nuestras fronteras. Precisamente Dalí quedó marcado por Cadaqués en su totalidad, por su luz, por su aire, por su mar y su entorno, algo que puede apreciarse en el óleo sobre tela titulado Port Alguer.
En el centro de Cadaqués se puede disfrutar del casco antiguo en su origen rodeado por una gran muralla de la que sólo queda un pequeño baluarte integrado en el actual ayuntamiento; el pavimento del casco antiguo está hecho con piedras extraídas de la orilla del mar y es la calle des Call la que mejor conserva este tipo de pavimento.
En el punto más alto del casco se encuentra la iglesia de Santa Maria correspondiente al estilo gótico tardío y con un impresionante retablo barroco dorado de 23m de altura.
El Museo de Cadaqués, con exposiciones temporales de artistas vinculados con la población, también es una alternativa muy válida para los visitantes pues alberga galerías de arte de estilos ricos y diversos y actividades programadas durante todo el año para personas de todas las edades y preferencias.
Casa Museo de Dalí, visita obligada
Es visita obligada la Casa Museo de Dalí, que se ubica en la cala de Portlligat y es una buena representación del estilo de vida y universo del artista; en 1930 Dalí se instaló en una pequeña barraca de pescadores y creó lo que él llamaría más tarde "una verdadera estructura biológica... A cada nuevo impulso de nuestra vida le correspondía una nueva célula, una cámara". La cala de Portlligat es una de las más conocidas del entorno y para definirla tomaremos prestadas las palabras del propio Dalí en su biografía Vida Secreta:
"Es uno de los lugares más áridos minerales y planetarios de la tierra. Las mañanas ofrecen una alegría salvaje y amarga, ferozmente analítica y estructural; las noches son morbosamente tristes: los olivos brillantes y animados durante el día, se metamorfosean en un gris inmóvil, como de plomo. La brisa matinal dibuja sonrisas de pequeñas olas felices a las aguas, por la tarde ya menudo, como consecuencia de los islotes que hacen de Portlligat una especie de lago, el agua está tan tranquila que refleja los dramas del cielo crepuscular ".
Cap de Creus, un espectáculo natural
También es interesante acercarse a Cap de Creus, el punto más oriental de la península Ibérica, donde los Pirineos mueren al mar. En esta zona natural protegida podemos observar unas formaciones geológicas muy curiosas y visitar el Espai Cap de Creus, punto de información del Parque Natural y pequeño museo de divulgación científica de la zona.
Es recomendable recorrer sus itinerarios, algunas de ellos con acceso a calas únicas y de aguas cristalinas. Pasear por el Parque Natural del Cap de Creus es asistir a un espectáculo de millones de años de evolución.
Cadaqués ofrece, durante el verano, una intensa vida social y cultural. El resto del año se puede disfrutar de la tranquilidad propia del invierno y que invita a recorrer los callejones serpenteantes del pueblo y a hacer excrusiones por los diversos senderos que integra el término municipal.