Descubre las ciudades latinoamericanas consideradas patrimonio cultural de la humanidad

Celebrar el paisaje único y diverso de la Tierra viajando a conocer un sitio catalogado como Ciudad Patrimonio Cultural de la Humanidad, así como de paisajes culturales, es un honor y compromiso. Estar incluido en la lista de Patrimonio de la Humanidad de la Unesco lleva consigo una serie de responsabilidades que hay que cumplir. Estos deberes exigen sacrificio y esfuerzo por parte de la ciudad o el sitio inscrito en dicha relación de lugares patrimoniales de Latinoamérica. En el corazón de América Latina, en medio de su rico tapiz cultural y paisajístico, se encuentran ciudades por conocer, que ya disfrutan y ofrecen este prestigioso galardón que se otorga a numerosos pueblos y ciudades de los países de Latinoamérica que combinan la historia, cultura y belleza natural.

Cusco, fascinante, impresionante y auténtico, cuya historia vive en las calles, plazas valles y pueblos. La ciudad de Cusco es una muestra impresionante de alta ingeniería incaica que dominó la piedra como en Choquequirao, Sacsayhuaman, Qenko, Tambomachay, Ollantaytambo y Machu Picchu (la joya inca construida con la sabiduría de los antiguos peruanos en un entorno ecológico). La antigua capital del imperio de los incas fue declarada Patrimonio de la Humanidad por UNESCO en 1983 y es uno de los destinos turísticos más visitados en Perú.

La ciudad lo tiene todo, desde sus elegantes edificios con balcones coloniales y sus amplias plazas con decoradas con fuentes, a sus iglesias de altares y púlpitos con ricas tallas en madera, y museos y ruinas a cada paso. La ciudad declarada en la Constitución Peruana como la “capital histórica del país”, se encuentra en el sureste peruano, en concreto en la parte oriental de la Cordillera de los Andes. Cusco fue la capital y sede del gobierno imperial y fue la ciudad más importante de los Andes y de América del Sur, convirtiéndose en la principal ciudad cultural y eje de la cultura religiosa.

Ouro Preto significa “oro negro” y evoca a los antiguos buscadores de oro.

En el estado brasileño de Minas Gerais se encuentra la ciudad histórica de Ouro Preto, la cual se fundó a finales del siglo XVII. Su nombre significa “oro negro” y evoca a los antiguos buscadores de oro que se movían por la que era el centro de una explotación minera. Su valor es tal que fue el primer sitio en el país declarado como Patrimonio de la Humanidad en 1980.

Entre los monumentos que puedes admirar aquí se encuentran edificios religiosos como la iglesia matriz de nuestra Señora del Pilar, la Iglesia de San Francisco de Asís, la iglesia de Nuestra Señora del Rosario, así como el Museo da Inconfidência y el Teatro Municipal. A unos 8 kilómetros de Ouro Preto se localiza la Mina de Ouro da Passagem. Tiene once iglesias, doce capillas y siete estampas del Vía Crucis, entre sus morros, como todo pueblo del valle, se siente una energía ancestral y una religiosidad intensa que tiene su auge en Semana Santa, con sus procesiones luminosas y calles cubiertas de flores.

La gran historia detrás de Cartagena de Indias le valió para ser declarada por la UNESCO en 1984 como Patrimonio Histórico y Cultura de la Humanidad. Cartagena es una ciudad museo. Sus calles y alrededores muestran el encanto de su arquitectura que mezcla lo colonial. Durante la época colonial, su excelente ubicación estratégica la convirtió en un fortín militar de la corona española, siendo para entonces el puerto más importante de las Américas.

Cartagena llegó a ser el puerto más importante de las Américas.

Detrás de la belleza de Cartagena se encuentran edificaciones religiosas y militares que datan de la colonia y que han visto pasar los mejores momentos de su historia resguardada en una bahía del mar Caribe; el puerto de Cartagena posee el conjunto de fortificaciones más completo de toda Sudamérica. Un sistema de zonificación divide la ciudad en tres barrios diferenciados: el de San Pedro, con la catedral y numerosos palacios de estilo andaluz; el de San Diego, antiguo lugar de residencia de los mercaderes y la barriada popular de Getsemani.

Como todas las ciudades coloniales, el centro histórico de Cartagena de indias se destaca por su patrimonio religioso, como la Iglesia de Santo Domingo, la iglesia y monasterio de San Pedro Claver y los conventos de San Francisco y San Agustín. Cartagena de Indias es una de las ciudades más turísticas de Colombia.

El centro histórico de Quito Colonial es el más grande y quizás uno de los mejores conservados de Sudamérica. Quito, la capital de Ecuador, fue declarada Patrimonio Cultural de la Humanidad de la Humanidad es la única urbe declarada como ciudad entera, entre los atractivos, que tiene el Centro Histórico. La Catedral de Quito, conocida simplemente como la Catedral, está ubicada en el costado suroeste de la Plaza de la Independencia. Es uno de los edificios más emblemáticos de la ciudad y una de las catedrales más importantes de América del Sur.

El centro histórico de Quito Colonial es el más grande y quizás uno de los mejores conservados de Sudamérica.

Construida en 1565, su diseño arquitectónico es una mezcla de estilos. Sobre la Plaza de independencia está la entrada del “Arco de Carondelet”, con su característica escalera. Monasterios como los de San Francisco y Santo Domingo, iglesias como la Compañía de Jesús, La Merced, El Santuario de Guápulo, la Recoleta de San Diego, por nombrar solo las principales, y que son ejemplos del arte de la escuela barroca quiteña que reúne las tradiciones artísticas, indígenas y europeas; además de ser reconocidas por proporcionar la mayor contribución de la América española al arte universal, no solo por su valor artísticosi no también por sus elementos decorativos.

La Antigua Guatemala fue declarada Patrimonio Cultural de la Humanidad por la UNESCO. Esta bella y mágica ciudad colonial guarda casi quinientos años de historia, con un clima privilegiado y una excepcional vista hacia los volcanes de Fuego y Acatenango. Fue construida en el Valle de Panchoy y nombrada la tercera sede de la capital de Guatemala. En esta ciudad el tiempo se detuvo y quedó atrapado en las gruesas paredes de sus templos, sus monasterios y sus casas coloniales. Esta colorida población aún conserva edificaciones restauradas del siglo XVI y puede recorrida a pie a través de sus calles empedradas. La belleza de esta ciudad radica en cada uno de sus detalles. Sus atractivos históricos, antiguos templos y monasterios que forman parte de su legado.

Los principales atractivos turísticos de la Antigua son El Palacio de los Capitanes Generales, El Convento y Arco de Santa Catalina, La Plaza Mayor, El Museo de Jade, la Antigua Catedral de Guatemala, el museo de la Universidad de San Carlos, la Ruta Santa del Hermano Pedro, entre otros. La ciudad también es rica en artesanía tales como tejidos típicos, cerámica, productos de plata y oro, dulces típicos y gastronómicos.

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