Tomarse una pastilla para muchas personas puede llegar a ser un verdadero reto, prefieren evitarlo y pasar por la molestia sin necesidad de ningún analgésico. Existen diferentes trucos y métodos para calmar este dolor de cabeza, pasando por alto el proceso de tragarse una pastilla.

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Es importante saber que no todos los dolores de cabeza son iguales y es fundamental acudir a un médico si este dolor es constante, ya que existen diagnósticos más allá de unas molestias ocasionales.

Conoce las migrañas

Uno de los tipos por los que se debería acudir a un médico son las migrañas, estas pueden ir desde un dolor moderado hasta uno intenso que te impida hacer vida normal desde unas cuantas horas hasta, incluso, días.

Las migrañas suelen tener un componente hereditario, posiblemente alguien de tu familia haya sido diagnosticado con ellas antes. En muchas ocasiones, te avisan de que van a aparecer con dolores mucho menos intensos o la visión de manchas, es ahí cuando tienes que empezar a tomar medidas.

Aunque no te lo cuenten, hay pastillas que llevan componentes que empeoran las migrañas. Si estás tomando la píldora anticonceptiva y desde que lo haces tu dolor de cabeza ha ido a peor es, posiblemente, porque la pastilla que estás tomando contiene estrógenos.

Los estrógenos son un grupo de hormonas que juegan un papel muy importante en la salud femenina, tener niveles constantes de estrógeno puede mejorar el dolor de cabeza en algunas personas, pero también, empeorarlo.

Este tipo de dolor te hace especialmente sensible a la luz y el ruido, es por ello por lo que el método más famoso es abstenerse a este tipo de estímulos. 

Si lo que tienes es un leve dolor de cabeza y quieres calmarlo, te contamos diferentes métodos para pasar por ese pequeño duelo de manera más liviana.

Nuestro amigo el frío

El truco tan famoso de cuando éramos pequeños y nos ponían toallas mojadas en la frente, sí que funciona. Aplicar frío durante un rato puede provocar mucho alivio.

Moja una pequeña toalla o un trapo que tengas a mano y colócalo en la frente, si este dolor te ha dado en el trabajo o estás fuera de casa, coge una botella de agua y pásala por la cara, dejándola reposar en sitios como la frente o la nuca.

Come y bebe

En muchas ocasiones, tanto el dolor de cabeza como muchos otros dolores se dan porque llevamos mucho tiempo sin comer y no tenemos energía, es bueno para nuestro cuerpo comer algo y ganar algo de aquello que hemos perdido.

Hay algunos alimentos que te ayudan a reducir este dolor, desde los frutos secos como las almendras o frutas como la sandía, que puede aportarte todo el líquido que quizás no has estado tomando en este tiempo.

Hablando de líquidos, es muy importante beber agua, ya que la deshidratación puede desencadenar dolor. Pero nunca en exceso, puesto que si tomas más de la que puedes soportar puedes sufrir de hiponatremia, toma agua siempre en su justa medida. 

A menudo, se recomiendan bebidas como la cafeína, en pequeñas cantidades un café puede ayudar a controlar un ataque de dolor, pero utilizarlo como tratamiento todas las veces puede llegar a ser perjudicial.

Acupresión

Un método que no todo el mundo conoce y que en muchas personas es un tratamiento muy efectivo es la acupresión, un tipo de masaje que se basa en la acupuntura, la práctica de la medicina tradicional china y que sirve para calmar el dolor aplicando presión en puntos específicos del cuerpo.

Esos puntos específicos del cuerpo son los acupuntos y el punto específico para el dolor de cabeza es el punto Hegu, que se encuentra en el dorso de la mano, entre la base del pulgar y el dedo índice. Hacer acupresión sobre este punto puede ayudarte a aliviar el malestar.

Punto Hegu

Un masaje

Existen algunos masajes que también pueden favorecer a que este dolor sea más leve, uno de ellos es masajear el cuello. Si pones las dos manos en el cuello, tienes que masajear desde arriba y hacia abajo y desde el centro hacia los lados durante un par de minutos.

Otro de los masajes consiste en entrelazar las dos manos en la parte de atrás de la cabeza, deja que esta caiga hacia delante y donde tengas los dos dedos pulgares, en los dos laterales de la cabeza, es la zona que tienes que masajear.

El vaso de agua

Aunque parezca una locura, existe un truco específico que a muchas personas les ha ayudado con el dolor. Lo único que necesitas es una toalla y un vaso de agua. Coloca la toalla en tu cabeza y tienes que posicionar el vaso lleno de agua bocabajo, para que toda el agua caiga en la toalla.

Es posible que se formen burbujas en el vaso de agua, no te preocupes, cuando todas ellas hayan desaparecido, el dolor habrá ido a menos.

Cristales con filtro azul

Estar durante mucho tiempo enfrente de una pantalla del ordenador e, incluso, delante de la pantalla de tu móvil puede empeorar mucho el dolor. Es por ello por lo que utilizar gafas que bloquean los rayos UV, pueden beneficiarte a calmar el malestar.

Un piercing

Por último, y a pesar de ser un método más "moderno" y muchas personas no se atrevan a hacerlo, uno de los modos más efectivos para calmar el dolor de cabeza es el famoso piercing en la oreja o daith piercing que también está relacionado con la acupuntura.

Este método surgió por la difusión de la teoría del Dr. Thomas Cohn, que contaba que al perforar el cartílago en la oreja, donde tradicionalmente la medicina china aplica el pinchazo con la aguja, este dolor mejoraba notablemente.

Todos estos trucos dependen de la persona y del dolor, siempre es importante si el dolor no cesa, tomar medidas como un analgésico o acudir a un experto.