Hay ciudades en el mundo que favorecen el turismo, que implantan medidas que acogen a todos los visitantes que acuden. Sin embargo, hay otras que actúan de forma totalmente contraria.
[La mejor ciudad del mundo para vivir está en España y seguro que estás de acuerdo]
En el mundo existen varias ciudades con exceso de turismo y Dubrovnik es una de ellas. Hay algunas que deciden ignorarlo y nutrirse de todas las ventajas que esto supone, pero hay otras que deciden tomar medidas contra ello.
Dubrovnik es una ciudad en Croacia que va siempre un paso adelante para el bienestar de su población, tomando precauciones, implantando medidas para la protección de los vecinos e incluso prohibiendo algunos elementos.
En 2020, la ciudad croata limitó el número de cruceros diarios que podían atracar en su puerto, así como de los cruceristas simultáneos. Una medida que se implantó también en España, concretamente en Baleares, convirtiéndose en el primer destino nacional (y el segundo europeo) en limitar el número de estos barcos.
No más ruido en Dubrovnik
El siguiente paso que ha dado esta ciudad va más allá, ya que ha prohibido el uso de maletas con ruedas por su casco histórico debido a la contaminación acústica que causan. Como consecuencia, los turistas deberán cargarlas hasta llegar a su destino.
Una medida que lleva implementada desde este verano, pero, sin embargo, el alcalde de la ciudad comunicó que a partir de noviembre se ofrecerá un servicio de traslado al alojamiento, para evitar esta carga de maletas que, en muchas ocasiones, puede ser hasta doloroso.
Los turistas deberán dejar las maletas antes de entrar al casco histórico y pagar una tasa para que el servicio de traslado les lleve el equipaje a la dirección deseada.
En declaraciones a los medios, el alcalde, Mato Franković, explicó que la toma de su decisión se debe a las quejas de los ciudadanos, quienes manifestaron que el ruido que provocaban las ruedas en el asfalto no les dejaba dormir.
Una norma que irá más allá y que su objetivo final será crear un centro logístico en el aeropuerto de Dubrovnik para trasladar los equipajes desde allí hasta el hotel.
Esta contaminación acústica no solo viene de objetos como las maletas de ruedas, sino que, el programa 'Respect the City', que lleva trabajando desde el 2018 para reducir los efectos negativos del turismo, también ha anunciado una regularización de los vehículos de reparto de equipaje, que tendrán que ser eléctricos.
Otras medidas que forman parte del programa son tales como la prohibición de subirse a los monumentos de la ciudad o pasear sin camiseta por la parte antigua, situaciones que pueden alterar a los vecinos.
La ciudad apuesta por promover lugares que se encuentran fuera del casco histórico para lograr que los turistas no se aglomeren en un mismo sitio y que haya menor afluencia en sus calles.
Dubrovnik no es la única ciudad que toma medidas contra el turismo, también otras como Bali han seguido sus pasos. La isla ubicada en Indonesia es el destino idílico para muchas personas, pero quienes la visiten también tienen que tener en cuenta algunas medidas.
Primero llegó la prohibición de las motos en la isla, tras una serie de accidentes con turistas involucrados, Bali decidió que los visitantes deberán desplazarse con los vehículos facilitados por las agencias de viajes.
La isla también decidió prohibir el alpinismo después de una oleada de malos comportamientos por parte de los turistas. El gobernador anunció la medida con efecto inmediato en un intento de preservar sus cumbres sagradas.