Si bien en los últimos años ha vivido un auténtico auge, el kimchi no es un alimento excesivamente conocido en España. Sin embargo, al otro lado del mundo, en Corea, es un alimento omnipresente en todas las comidas. Por establecer una comparación, sería como el pan que se sirve diariamente en las mesas de nuestro país. 

Elaborado mediante la fermentación, la receta tradicional coreana suele incluir col china y otros condimentos como azúcar, sal, cebolla, ajo, jengibre o guindillas. También suele incluir otras verduras como rábano, apio, zanahoria, pepino, berenjena, espinacas, cebolleta, remolacha o brotes de bambú. 

Eso sí, explicar el sabor del kimchi es mucho más difícil. Es dulce, salado, picante, fresco, ligeramente amargo… Una miscelánea que tan solo quizás el umami, ese término tan de moda en la actualidad, pueda explicar. Su complejo sabor, no obstante, no sólo es capaz de brindar grandes propiedades gastronómicas y culinarias, sino que también ofrece numerosos beneficios para la salud

Entre ellos, el kimchi podría ser una ayuda para perder peso. Y es que tanto el kimchi fresco como el fermentado son bajos en calorías. Según la revista Healthline, una taza de kimchi (150 gramos) tiene tan solo 23 calorías. Para hacernos a la idea, un donut sin ningún tipo de relleno tiene la friolera de 300 gramos, más de 10 veces más. 

Adelgazar comiendo kimchi

En 2010, un grupo de investigadores liderado por Eun Kyoung Kim, de la Universidad de Ajou (Suwon, Corea del Sur), realizó un estudio que se desarrolló durante 4 semanas y contó con 22 personas con sobrepeso. Durante esas semanas, los participantes comieron diariamente una ración de 300 gramos de kimchi, fermentado o fresco, en cada fase de la dieta. 

Los resultados del estudio, publicado en la revista Nutrition Research, indicaron que en ambos casos el consumo de este alimento favoreció la reducción del peso corporal, el índice de masa corporal (IMC) y la grasa corporal

Sin embargo, el consumo de kimchi fermentado —en comparación al fresco— tuvo una serie de beneficios adicionales. Tal y como concluyen los investigadores, la ingesta de kimchi fermentado tuvo una reducción más significativa en la presión arterial sistólica, la presión arterial diastólica, el porcentaje de grasa corporal, la glucosa en ayunas y el colesterol total. Además, la variedad fermentada tuvo un efecto positivo en la reducción de los niveles de azúcar en sangre. 

Si bien no está claro cuáles son las propiedades del kimchi que son responsables de los efectos sobre la pérdida de peso, su bajo contenido calórico, su alto contenido en fibra y sus probióticos podrían tener un importante papel en este proceso.

Dónde comprar o cómo prepararlo 

Cada vez es más frecuente encontrar kimchi en los supermercados, aunque, al ser un producto de Corea, es mucho más fácil encontrarlo en supermercados especializados en productos asiáticos, donde venden el kimchi fresco o ya encurtido, que suele venir en lata o bote de cristal. 

Sin embargo, también es posible preparar el kimchi en tu casa de una manera bastante sencilla. Los ingredientes, eso sí, pueden ser difíciles de encontrar y varían de una receta a otra.

La youtuber Yui Yao, por ejemplo, propone los siguientes ingredientes para su preparación: 2,5 kilogramos de col china, 100 gramos de sal, 500 mililitros de agua, 30 gramos de arroz glutinoso (sustituible por harina, aunque no recomendable); 30 gramos de azúcar, 250 gramos de nabo, 150 gramos de zanahoria, 10 cebolletas chinas, 25 dientes de ajo, 10 gramos de jengibre, media cebolla, 125 mililitros de salsa de pescado y de 150 a 300 gramos de gochugaru o chile en polvo.