¿Ganas de yoga este 2024? Estas son 5 posturas para principiantes que puedes introducir en tu rutina

En el frenético mundo moderno, donde la prisa y el estrés son moneda corriente, la búsqueda de formas para encontrar paz interior y bienestar se ha vuelto una necesidad imperante. En este contexto, el yoga emerge como un faro de serenidad, guiando a quienes lo practican hacia un estado de equilibrio físico y mental. 

[Qué es el método Hanasaki: el truco japonés para vivir más de 100 años que arrasa en España]

Este ancestral arte, que combina la disciplina física, la respiración consciente y la meditación, ha ganado popularidad en todo el mundo como un camino hacia la armonía interna. 

Descubre las raíces del yoga, su esencia, los beneficios que ofrece, a quiénes se recomienda y cómo introducirte en este ejercicio con posturas para quienes den sus primeros pasos en este fascinante viaje hacia el bienestar. 

Orígenes del yoga

El yoga, originario de la antigua India, tiene sus raíces en las prácticas espirituales y filosóficas que datan de miles de años. Se encuentra mencionado en los Vedas, los textos sagrados hindúes, y se ha transmitido de generación en generación a través de una rica tradición oral. 

A lo largo de los siglos, el yoga ha evolucionado y se ha ramificado en diversas formas y estilos, adaptándose a las necesidades cambiantes de la sociedad. En su esencia, es mucho más que una serie de posturas físicas; es una filosofía de vida que busca la unión y conexión entre el cuerpo, la mente y el espíritu. 

[Cúrcuma, naranja y los remedios caseros: así son los beneficios de tomar esta infusión en ayunas]

La palabra 'yoga' proviene del sánscrito y significa 'unión' o 'yugo'. La práctica busca armonizar los aspectos físicos, emocionales y mentales de la existencia humana, llevando a quienes lo practican a un estado de equilibrio y plenitud.

Qué es el yoga

El yoga se compone de varios elementos interrelacionados, siendo la práctica física solo uno de ellos. La atención plena, la respiración consciente (pranayama), la meditación y la ética son también aspectos cruciales del yoga. 

Estos elementos trabajan en conjunto para fortalecer el cuerpo, calmar la mente y expandir la conciencia, brindando a quienes lo practican una sensación de paz interior y conexión con su ser más profundo.

Los beneficios de esta disciplina son multifacéticos y abarcan tanto el ámbito físico como el mental. Desde una mejora en la flexibilidad y fuerza muscular hasta la reducción del estrés y la ansiedad, el yoga se ha consolidado como una herramienta integral para mejorar la calidad de vida. 

[¿Los músculos se estresan? Así puedes prevenir el dolor y las agujetas después de hacer ejercicio]

Además, se ha demostrado que la práctica regular del yoga contribuye a la reducción de la presión arterial, mejora la calidad del sueño y promueve una mayor conciencia corporal. Puede adaptarse a diversas edades, niveles de condición física y necesidades específicas.

Desde niños hasta personas mayores, y desde atletas hasta aquellos que buscan rehabilitación, el yoga ofrece un espacio inclusivo para todos. Aunque es especialmente recomendado para aquellos que buscan equilibrar la vida agitada contemporánea con un enfoque más sereno y consciente.

Posturas para principiantes

Para quienes se aventuran por primera vez en el mundo del yoga, es fundamental comenzar con posturas simples que permitan desarrollar fuerza, flexibilidad y conciencia corporal. Aquí dejamos cinco esenciales para principiantes:

• Tadasana (postura de la montaña). Esta postura básica de pie ayuda a mejorar la postura, fortalecer los músculos de las piernas y la espalda, y aumentar la conciencia de la respiración.

• Adho Mukha Svanasana (perro hacia abajo). Una postura de flexión hacia adelante que estira la espalda, los hombros y las piernas, aliviando la tensión y fortaleciendo los músculos de la espalda.

• Balasana (postura del niño). Una postura de descanso que ayuda a relajar la espalda, los hombros y el cuello, y que también fomenta la conexión con la respiración.

• Utkatasana (postura de la silla). Fortalece los músculos de las piernas y la espalda, al tiempo que mejora el equilibrio y la concentración.

• Sukhasana (postura fácil). Una postura sentada que promueve la calma mental, mejora la postura y facilita la práctica de la meditación.

El yoga, con sus profundas raíces en la sabiduría ancestral, se erige como un faro de equilibrio en nuestro acelerado mundo moderno. Su práctica ofrece innumerables beneficios, desde mejorar la salud física hasta cultivar la paz interior. 

Independientemente de la edad, condición física o experiencia previa, el yoga brinda a todos la oportunidad de embarcarse en un viaje transformador hacia la armonía y el bienestar. Así, al adoptar este antiguo arte, cada uno puede descubrir un camino hacia la conexión consigo mismo y una vida más plena.