Una mujer limpiando la vitrocerámica.

Una mujer limpiando la vitrocerámica. iStock

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Ni pasta de dientes ni limón: este es el ingrediente definitivo para eliminar los arañazos de la vitrocerámica

Los expertos recomiendan un ingrediente mucho más práctico y sorprendentemente efectivo, que probablemente ya tengas en casa.

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Es habitual que nos encontremos con arañazos en la vitrocerámica que no son fáciles de quitar, y aunque es habitual recurrir al uso de pasta de dientes o limón, los expertos utilizan un ingrediente mucho más eficaz para acabar con ellos, una opción de lo más recomendable por el excelente resultado que ofrece.

Si te encuentras en uno de esos días en el que quieres limpiar a fondo tu hogar, tendrás que prestar especial atención a la vitrocerámica de la cocina, uno de los elementos más usados de la cocina. Para que luzca como el primer día y además pueda seguir ofreciendo un buen funcionamiento.

Un gran aliado para acabar con estos arañazos presentes en la vitrocerámica es un ingrediente que terminará por sorprender por su resultado y que se tiene habitualmente en casa, por lo que conviene tenerlo muy presente.

No uses ni pasta de dientes ni limón

Antes de desvelar cuál es el ingrediente que usan los expertos para quitar los arañazos de la vitrocerámica, es importante recomendar que no se debe usar ni pasta de dientes ni limón. Para empezar, aunque la pasta de dientes es conocida por su acción abrasiva, no es la mejor opción para este fin y podría dañar la superficie.

Por otro lado, el limón, aunque natural, no resulta efectivo para quitar arañazos profundos y puede dejar residuos ácidos que afecten el acabado de la vitrocerámica. Es preferible optar por soluciones más adecuadas y eficaces que garanticen un buen resultado.

El ingrediente clave para quitar arañazos

Si seguimos las indicaciones de los expertos, para limpiar la vitrocerámica se puede usar un poco de agua tibia y un trapo, de forma que se puedan eliminar los restos de comida o de grasa que puedan haber quedado en ella.

La comida incrustada o la grasa se debe retirar al momento o en el mismo día, lo antes posible, o será uno de los causantes de que la vitrocerámica y toda la cocina, acaben por ser un problema. Por ello, conviene utilizar un trapo para limpiarla en primer lugar, si bien no es la solución definitiva.

Para desinfectar la vitrocerámica se debe añadir un poco de vinagre al agua, siendo esta una excelente forma de poder conseguir que este elemento de la cocina se encuentre lo más limpio posible. El vinagre es uno de los mejores limpiadores a los que podemos recurrir, aunque no es el único.

De hecho, otro de nuestros grandes aliados es el bicarbonato de sodio, un elemento que, junto al vinagre y el agua, acabará por ofrecer la combinación definitiva para poder conseguir la limpieza más adecuada de la vitrocerámica. Con ambos ingredientes se conseguirán eliminar tanto la suciedad como los olores que hayan podido quedar, consiguiendo de esta forma una limpieza muy eficaz y sin necesidad de usar productos químicos.

Esta es una recomendación de los expertos, que saben muy bien los ingredientes que ofrecen una gran eficacia a la hora de lograr el acabado y la limpieza que todo el mundo busca.

Otros trucos caseros para limpiar la vitrocerámica

Más allá del ingrediente mencionado, existen diferentes trucos caseros que se pueden poner en práctica para limpiar la vitrocerámica y que esta se mantenga brillante, algo que no siempre es sencillo, sobre todo si se ha quemado o derramado algo. Algunos trucos y recomendaciones para ello son los siguientes:

  • No uses un estropajo: para retirar los restos de comida o del producto que se quieran limpiar de una vitrocerámica, nunca se debe usar un estropajo, ya que podría rayar la superficie de la vitrocerámica. En su lugar, se debe usar una bayeta ecológica o papel de cocina. Además, la rasqueta es un utensilio imprescindible para su mantenimiento y limpieza, permitiendo una limpieza eficaz sin rayones.
  • Pasta de dientes: si una vitrocerámica está raspada después de haber llevado a cabo prácticas poco apropiadas para su adecuada conservación, se puede mejorar su apariencia aplicando pasta de dientes. En este caso habrá que colocar el dentífrico encima de un paño y frotar la superficie rayada, de forma que se podrán hacer desaparecer los rayones de este elemento de la cocina.
  • Limón para las manchas difíciles: si hay una mancha difícil de eliminar en la vitrocerámica, un remedio casero eficaz para poder deshacerse de ella es recurrir a echar sobre ella unas gotitas de limón. Tras mojar la mancha con el cítrico, deja reposar dos o tres minutos para que se ablande y, a continuación, pasa la rasqueta para deshacerte de los restos.
  • Hielo para desincrustar la suciedad: en ocasiones puede haber dificultades para poder eliminar una suciedad presente en la vitrocerámica con la rasqueta. En estos casos, un truco casero para hacerle frente es usar un cubito de hielo. Será suficiente con pasarlo por encima de la mancha durante un minuto, para luego repasar con la rasqueta y conseguir que la suciedad desaparezca.

Con estos sencillos trucos caseros, que se pueden llevar a cabo con productos y elementos que todo el mundo tiene en casa, es posible conseguir que la vitrocerámica luzca de la mejor manera posible, libre de suciedad y de rayaduras.

Es muy importante cuidar la vitrocerámica desde el principio para conseguir que luzca más brillante, nueva y limpia, lo que ayudará a que aumente su durabilidad y funcione de la forma correcta durante más tiempo.