La piel de plátano fue durante mucho tiempo desechada y tirada a la basura, pero en los últimos tiempos son cada vez más quienes optan por congelarla, en lo que supone una vuelta al pasado, cuando era imprescindible aprovechar cada recurso al máximo. Detrás de esta práctica existe un buen motivo.
El plátano es una fruta que no puede faltar en ningún hogar, ya que independientemente de que se consuma a la hora del desayuno o la merienda, aporta grandes beneficios para la salud de niños y adultos. De hecho, se ha convertido en un básico para deportistas o aquellas personas que necesitan de un aporte extra de energía.
Por cada 200 gramos de plátano se consigue un aporte de 188 kcal de calorías, 2,4 gramos de proteínas, 40 gramos de hidratos de carbono, 0,6 gramos de grasas, 6,8 gramos de fibra, 1,2 gramos de hierro, 76 mg de magnesio, 700 mg de potasio y 56 mg de fósforo, siendo una composición muy interesante desde el punto de vista nutricional.
¿Por qué se congela la piel del plátano?
La piel del plátano tiene muchas propiedades y esto hace que se puedan aprovechar de muchas formas posibles. A través de las redes sociales se han viralizado diferentes trucos y consejos, y uno de los más recurrentes es la de aprovechar la piel de esta fruta como fertilizante.
De esta manera, además de ser un alimento perfecto para la salud, puede ser un gran aliado para el jardín, que se debe preparar para la llegada del frío. Los expertos recomiendan no tirar la cáscara del plátano, sino que es preferible usarlo como fertilizante por su contenido en macronutrientes como hierro, manganeso, cobre, zinc, boro y molibdeno, que promueven el crecimiento de las plantas del jardín, desde la germinación de las semillas hasta la floración y los frutos.
Para ello, solo hay que colocar las cáscaras en agua y hervir durante unos 20 minutos, para luego dejar que enfríe y se lleva a diluir en una proporción de una parte de té de cáscara de plátano por 10 de agua, dándole cien vueltas hacia la derecha a la mezcla y luego cien a la izquierda con un palo de madera para evitar modificaciones en la estructura química. Una vez seguidos estos pasos, estará listo para aplicar a las plantas. Se debe repetir una vez al mes.
Este sencillo fertilizante se puede ir preparando a medida que se necesita, y es por ello por lo que se puede congelar la piel del plátano hasta que llegue el momento de utilizarla. Aunque se trata de un truco muy útil, debes saber que no se debe aplicar a diario, sino que se deben usar una vez al menos o cada dos semanas si las plantas están en plena floración.
El resultado de utilizar este fertilizante se podrá apreciar de forma casi inmediata, por lo que ya tienes una razón de peso para congelar la piel del plátano, sobre todo si tienes jardín.
Usos desconocidos de la cáscara de plátano
Una vez conocido su uso como fertilizante, no está de más conocer otros usos que tiene la cáscara de plátano y que son por muchos desconocidos, entre los que se encuentran los siguientes:
- Pulir plata: las cáscaras de plátanos contienen una serie de aceites que hacen que la plata opaca pueda volver a brillar, como si fuese nueva. Para ello es suficiente con frotar directamente la cáscara contra los artículos de plata o bien preparar una pasta en una licuadora, combinando un poco de agua con una cáscara de plátano, para luego humedecer con ella un paño suave y proceder a aplicarlo sobre los objetos de plata. Posteriormente, habrá que enjuagar con agua tibia y seca con un trapo limpio. De esta forma, se conseguirá una buena limpieza, prescindiendo del uso de productos más tóxicos y agresivos.
- Blanquea los dientes: gracias a que la cáscara contiene ácido salicílico, que es un astringente natural, así como ácido cítrico y una combinación de potasio, magnesio y manganeso, todos ellos que contribuyen a eliminar las manchas, se convierte en un gran aliado para blanquear naturalmente los dientes. Para aplicarlo solo hay que cepillar los dientes como lo haces de forma habitual, para luego frotar la parte interna de la cáscara por los dientes durante un par de minutos.
- Calma picaduras de mosquitos: las cáscaras de plátano también ayudan a calmar la picadura de mosquitos u otros insectos, puesto que gracias a que contiene polisacáridos, actúa como antiinflamatorio, calmando con rapidez la picazón y reduciendo la inflamación. Para ello, es tan sencillo como frotar la picadura con el interior de la cáscara de plátano.
- Ayuda a madurar los aguacates: la cáscara posee etileno, una sustancia que acelera la maduración, por lo que puede ser un gran aliado para madurar un aguacate. Solo tienes que ponerlo en una bolsa con unos trozos de cáscara de plátano y dejarla cerrada durante 24 horas.
- Abrillanta el cuero: cuando se busca abrillantar algunos artículos de cuero, como correas o zapatos, e incluso muebles, basta con frotar la cáscara de plátano sobre la superficie a tratar y pasar, a continuación, un trapo de algodón para así poder eliminar los restos de plátano, consiguiendo así un excelente resultado final.
- Repelente natural: si tienes pulgones en el jardín, antes de usar químicos, puedes probar con la cáscara de plátano, cuya capacidad antimicrobiana ayuda a cuidar el jardín. Solo se necesita cortar la cáscara en pequeños trozos y enterrarla debajo de las plantas afectadas, y en pocos días desaparecerán.