Da igual que seas supersticioso o no, seguro que alguna vez te has fijado en este talismán a la hora de visitar cualquier mercadillo o puestecito de playa. Y esto es porque sus llamativos colores y su diseño único captan la atención de cualquiera que se tope con él.
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Conocido como ojo turco, este abalorio azul, blanco y negro también recibe el nombre de nazar. Su objetivo es proteger a la persona que lo porte de las malas energías, entre las que destaca la envidia —también llamada mal de ojo—. El nombre se debe a que, según algunas creencias, solo podemos conocer las verdaderas intenciones y sentimientos de las personas a través de los ojos, al ser estos la parte más expresiva del cuerpo.
Originario del antiguo Egipto y Babilonia, hoy en día es un amuleto muy común en Turquía y en Grecia, donde se usa para "distraer" la mirada de todo aquel que nos desee mal. Se suele llevar como accesorio en pulseras, collares o pendientes, aunque también se venden sueltos, como llaveros, como imanes..., y en cualquier forma imaginable.
Algunos fanáticos de la brujería defienden que la pupila del ojo se expande cuando ha absorbido los malos sentimientos. En casos extremos, el nazar se puede llegar romper, lo que significaría que ha atraído demasiada energía negativa y que debemos deshacernos de él y adquirir uno nuevo.
Cómo limpiar el talismán
Los supersticiosos defienden que no basta solo con comprarse el ojo turco para que cumpla con su función protectora, sino que debemos 'prepararlo' para que lo haga. Los pasos para 'neutralizarlo' son los siguientes:
- Llenar un cuenco de cristal o madera de sal marina y con el dedo trazar una espiral del centro hacia fuera, en el sentido de las agujas del reloj.
- Colocar el ojo en el centro y poner piedras protectoras en los puntos cardinales.
- Alinear el cuenco con los puntos cardinales y dejarlo reposar durante 24 horas.
- Después, debes limpiar el amuleto con humo de palo santo o con agua con sal y un paño de fibras naturales.
- Por último, para 'activarlo' debes dejarlo expuesto durante una noche entera de luna llena y hasta las 12 de la mañana del día siguiente, para que también absorba la energía solar.
¿Qué significa cada color?
Aunque, tradicionalmente, el ojo turco suela ser de color azul, el talismán puede estar disponible en distintos tonos. En Vivir, te explicamos el significado de cada uno:
- Relacionado con la sangre, el amor y la pasión, tenemos el rojo. Es el color de la energía y el poder.
- El color del sol es el amarillo y simboliza la fuerza y la vitalidad. Es ideal para manifestar salud y vigor físico.
- El azul es el tono del agua y es el más común. Se vincula al buen karma, a las buenas energías y a la protección contra el mal de ojo.
- También con efecto protector tenemos el azul claro, que se asocia al cielo y simboliza la verdad.
- Asociado a la naturaleza, a la esperanza y al crecimiento personal tenemos el verde.
- El color blanco simboliza la luz, la bondad, la inocencia y la perfección. Su función es limpiadora y purificadora, por lo que transforma las energías negativas en positivas.
- Por último, nos encontramos el violeta, asociado a la nobleza, el poder, la ambición, además de a cualidades como la sabiduría, la dignidad, la independencia, la creatividad, el misterio y la magia.