Redes sociales como Instagram o TikTok no dejan continuamente de llenarse de trucazos con los que poder hacernos las vida un poco más fácil. Entre todos esos trucos virales, los trucos de limpieza y aquellos consejos útiles para el hogar, son siempre los que más visitas coleccionan. La razón de ello, es que con estos sencillos trucos podemos conseguir que todos los rincones de nuestra casa se mantengan limpios y su limpieza no suponga tanto esfuerzo físico o económico.

Uno de esos trucos de los que vamos a hablarte, no solo se trata de una manera efectiva de ayudarte con la limpieza de la casa y los diferentes suelos de cada estancia, sino que además evitará esas molestas pelusas que acaban adhiriéndose a la escoba y esparciéndose por el suelo. Para ponerlo a prueba simplemente necesitarás una de esas bolsas de plástico que tengas por casa o del supermercado. Te lo contamos.

El truco de la bolsa y la escoba: así es como funciona

Este truco casero es más sencillo de lo que parece. Todo lo que necesitas es una bolsa de plástico común, como las que usamos para ir al supermercado. Coloca la bolsa en la parte inferior de la escoba, asegurándola con un nudo en las asas para cubrir las cerdas. Ahora, simplemente barre como lo haces normalmente.

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¿Qué sucede a partir de ahí? Lo interesante de este truco de limpieza, es que la electricidad estática que se genera al frotar el plástico con el suelo hace el milagro. Esta atraerá todas esas pequeñas molestias del hogar, como el polvo, pelos o restos de comida que se acumulan en el suelo día a día.

Un truco que no solo te ayudará a mantener tu hogar más limpio, sino que también puede ahorrarte dinero. ¿Cómo? Al utilizarlo evitarás la necesidad de gastarte dinero en comprar una aspiradora.

Una solución con la que, no solo beneficiarás a tu bolsillo, sino que también reducirás el consumo de electricidad. Pero lo mejor, es que también podrás poner a prueba este truco en sofás, camas y otras superficies suaves. ¿A qué esperas para probarlo en casa?

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Otros trucos caseros para limpiar suelos

Además de este sencillo truco de limpieza que podrás empezar a poner a prueba con tu escoba, también puedes recurrir a otros trucos caseros útiles que podrán ayudarte a dejar tus suelos del hogar sin suciedad:

  • Vinagre y agua: Mezcla partes iguales de agua y vinagre blanco en una botella rociadora. Aplica la solución sobre el suelo y límpialo con una mopa o trapo. El vinagre ayuda a desinfectar y eliminar olores.
  • Limón y bicarbonato de sodio: Mezcla jugo de limón con bicarbonato de sodio para crear una pasta. Úsala para eliminar manchas y suciedad pegajosa. También deja un agradable aroma.
  • Agua y jabón suave: Una solución de agua tibia con unas gotas de jabón suave es eficaz para limpiar suelos no porosos, como baldosas y laminados.
  • Aceite esencial de árbol de té: Agrega unas gotas de aceite esencial de árbol de té a tu agua de limpieza. Además de limpiar, ayuda a repeler insectos y deja un aroma fresco.
  • Bicarbonato de sodio para alfombras: Espolvorea bicarbonato de sodio en alfombras antes de aspirar. Ayuda a eliminar olores y a limpiar las fibras.
  • Mopa de microfibra: Las mopas de microfibra atrapan polvo y suciedad eficazmente, sin necesidad de productos químicos.
  • Secado rápido: Después de limpiar el suelo, asegúrate de que se seque rápidamente. La humedad prolongada puede dañar ciertos tipos de suelos.