El blanco es un color ideal para la casa porque aporta luminosidad y hace más amplios los espacios entre otras cosas. Además, para el Feng Shui, este tono simboliza el equilibrio de la energía en el lugar y permite que esta fluya correctamente por los espacios sin interrupciones, propicia el descanso, la armonía y la pureza. Visto esto, tener las paredes blancas en tu hogar resulta una opción ideal, aunque también tiene sus incovenientes.
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Al ser tan claro, se mancha fácilmente, lo que hace que resulte difícil mantenerlo impecable, especialmente si hay niños o mascotas. Tranquilidad, no será necesario que llames a un pintor con asiduidad o que tengas que echar mano tú mismo de brocha y pintura para hacer desaparecer marcas molestas y antiestéticas. Los expertos en tips caseros saben cómo solucionarlo rápidamente y de manera eficaz.
Hay un sencillo truco para recuperar el blanco de las paredes sin tener que repintar y solo se necesita un producto que todo el mundo tiene en su cuarto de baño y utiliza diariamente. Antes de desechar la idea pensando que es necesario ser un verdadero manitas para llevarlo a cabo, tómate unos minutos y lee con atención. ¡Te vas a llevar una gran alegría al comprobar lo fácil que resulta!
La pasta de dientes es el producto que necesitas.
El producto que obrará el milagro es un bote de pasta de dientes blanca. Sus aliados para la tarea, un estropajo suave o una bayeta limpia y seca. Lo primero que hay que hacer es aplicar el dentífrico sobre el paño o la esponja que hayas decidido utilizar. ¡Importante que no esté mojado! Seguidamente, frotamos la mancha que queremos hacer desaparecer sin presionar demasiado fuerte y dibujando círculos con cuidado para no estropear la pintura.
Lo suyo es que la marca quede bien cubierta y que actúe unos segundos. Luego, sólo tendrás que retirar la pasta con otra bayeta o simplemente con papel de cocina y listo. ¿Magia? No, nadie necesita una varita mágica en plan Harry Potter para reparar las cosas en segundos. Con este sencillo truco te quedarás impresionado con los resultados. Se acabó tener que llamar a un profesional e invertir un dinero, puedes solucionarlo tú mismo.
Además de este, hay otro tip que se puede tener en cuenta y que también funciona. Por ejemplo, si hay un rayón en una de tus paredes blancas a causa de una rozadura de un mueble, se puede eliminar con una simple goma de borrar siempre que no esté muy marcada o sea muy profunda. También una mancha de haber apoyado las manos o haber dado sin querer con los zapatos. Incluso hay en el mercado esponjas borradoras que sirven para eso.
Una mezcla de agua y bicarbonato para frotar con un paño suave es otra buena opción a tener en cuenta. Siempre ha de hacerse de manera suave y sin mojar excesivamente la pared para no dañar la pintura.