El verano está a la vuelta de la esquina: los días son más largos, las temperaturas mejores y la cuenta atrás para entrar en la estación más deseada por todos, ya se ha activado. Nuestro cuerpo puede que siga en el trabajo y en las obligaciones del día a día, pero nuestra cabeza cada vez piensa más en donde vamos a pasar los días de vacaciones.
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Existen varios tipos de personas a la hora de elegir destino vacacional: los que prefieren la playa, los que encuentran la desconexión en la montaña, y los que apuestan por visitar una nueva ciudad. Eso sí, hay algo que une a los tres grupos por igual: el equipaje.
Muchas veces hacer la maleta puede suponer un auténtico dolor de cabeza, sobre todo si viajamos en avión y tenemos limitaciones de espacio. Surgen los problemas de siempre: qué llevar y qué no, pasarte 15 minutos subido encima de la maleta para intentar que cierre y, si estás muy desesperado, acabas pagando de más para poder ampliar tu equipaje.
Para que esto no suceda, desde VIVIR tenemos un truco con el que ahorrarás espacio en tu maleta, podrás meter más cosas y, sobre todo, evitarás pagar ese dinero extra.
Cambia de posición tu maleta
El secreto para conseguir más espacio en tu maleta de cabina, y, por lo tanto, poder llevar más cosas, es colocar la maleta de forma vertical y comenzar a meter las diferentes prendas en esa posición.
Puedes poner tu maleta apoyada en una pared e ir colocando la ropa doblada, amontonando las prendas una encima de las otras. Parece algo sencillo y que, aparentemente, no supone mucho cambio, pero al ponerlo en práctica comprobarás que cabe mucha más ropa que haciéndola de la manera habitual.
Y no solo eso, sino que también es mucho más cómodo para sacar la ropa. Muchas veces cuando viajamos y llegamos a nuestro destino, nos olvidamos por completo del minucioso orden que habíamos utilizado para que entrara todo bien en la maleta, y sacamos las prendas que vamos necesitando cada día sin pensar.
¿Qué pasa? Que cuando llega la hora de irnos, ya no nos acordamos como habíamos conseguido que toda la ropa que ahora tenemos extendida por la habitación, cupiera en nuestra maleta, que en esos momentos parece haberse encogido.
Al hacerla en vertical, es mucho más fácil sacar las prendas manteniendo el orden y sin desdoblar las otras, por lo que a la hora de volver, no emplearemos mucho tiempo en nuestro equipaje y podremos aprovechar bien hasta el último minuto de nuestras vacaciones.
Un tip de lo más sencillo que hará que ahorres tiempo y espacio, y que conseguirá que hacer la maleta no suponga un suplicio.
Además, de esta manera, no tendrás que renunciar a meter ese vestido que tanto te gusta o tus zapatillas favoritas, podrás viajar perfectamente con tu maleta de mano ordenada y llena de todo lo que necesites.