A falta de unas semanas para que el Gobierno envíe el Plan de Recuperación, Transformación y Resilencia a la Comisión Europea, las grandes empresas españolas reafirmaron este lunes su compromiso de inversión con todos los gobiernos -central, autonómico y corporaciones locales- después de escuchar al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, enumerar en 'Wake Up, Spain!' algunos de los sectores por los que se apostará con los fondos europeos.
Las nuevas subastas de renovables, los proyectos para el hidrógeno, la digitalización de 1,3 millones de pymes, la extensión de puntos de recarga para el vehículo eléctrico, el inminente Plan Moves 2021 que tendrá la electrificación de la movilidad como eje central o el impulso con ayudas fiscales y acuerdos con el sector financiero para la rehabilitación de viviendas fueron algunas de las palancas que Sánchez citó durante la inauguración de este gran foro económico y político organizado por EL ESPAÑOL, Invertia e I+D.
Junto a esas apuestas, la inversión en educación y formación jugará un papel esencial dentro del reparto de las ayudas europeas, algo esencial para las empresas, que vienen denunciando desde hace años el gran déficit que presenta España en este campo.
Sánchez prometió digitalizar las aulas, impulsar la Formación Profesional, transformar el mercado laboral con una apuesta decidida por la ciencia y tecnología, impulsar la economía circular, la economía de los cuidados y reforzar la industria turística, la cultura y el ocio en un país que reforzará su red de infraestructuras.
También se potenciará el teletrabajo y se modernizarán las Administraciones Públicas.
Y todo ello se hará a través de un Plan que será estudiado hoy en Consejo de Ministros en el que se incluyen 110 inversiones y 102 reformas, según avanzó el presidente en este evento.
Horas más tarde, la vicepresidenta económica, Nadia Calviño, confirmó que este documento ha buscado un "equilibrio" para combinar ambas necesidades: la inversión pública y las reformas que necesita España para corregir sus desequilibrios. Y prometió "coherencia" en esas reformas que serán dialogadas con los agentes sociales y se enmarcarán en las líneas que ha impulsado en los tres años que lleva ocupando la cartera de Economía.
Las primeras frases de la letra de este plan del que los empresarios ya habían escuchado la melodía gustó a las grandes empresas presentes en 'Wake Up, Spain!'.
La jornada del lunes, centrada en la digitalización, estuvo marcada por el optimismo de líderes empresariales como el presidente de Telefónica, José María Álvarez-Pallete que destacó que por primera vez en la historia, España entra en una nueva Revolución con la mejor infraestructura de Europa.
Pallete hizo un simil para explicar que gracias a las redes de telecomunicaciones que tenemos en España es como si un país hubiese entrado en la Revolución Industrial con máquinas de vapor ya funcionando.
Ese optimismo también fue mostrado por el presidente de Indra Sistemas, Fernando Abril-Martorell, que destacó que "España lo tiene todo para ser protagonista de esta nueva era digital".
Mientras, el presidente de CaixaBank, José Ignacio Goirigolzarri, reforzó ese buen ánimo al afirmar que la recuperación económica se podría acelerar si se refuerza el ritmo de vacunación, como se ha anunciado.
Acelerar inversiones
Con estos mensajes de optimismo, los líderes empresariales reafirmaron su compromiso con el sector público para acelerar la recuperación.
Y a la petición que hizo Sánchez en el foro de "unidad no sólo política, sino también de la iniciativa público-privada", el presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, respondió reafirmando el compromiso empresarial por invertir en España.
El Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia permitirá a este país recibir 140.000 millones de euros procedentes de la Unión Europea en forma de transferencias y créditos en los próximos seis años para transformar su economía.
Sin embargo, esa cuantía será muy superior cuando el sector privado se incorpore a los 110 proyectos de inversión que incorporará este plan.
Según las estimaciones que maneja la patronal, por cada euro que inyecte la Administración en estos proyectos será posible llegar a movilizar hasta cuatro euros de inversión privada. De hecho, la CEOE ha presentado ya una propuesta con 21 proyectos tractores para canalizar esas inversiones, como recordó ayer Garamendi.
'Colaboración radical'
Se trata de un nuevo marco de cooperación entre empresas y gobiernos que el presidente de EY, Federico Linares, describió como "colaboración radical" y que hasta la llegada de la pandemia no se había dado en España.
Desde el Gobierno, se calcula que el Plan de Recuperación tendrá un impacto positivo en el PIB de dos puntos adicionales de media anual entre 2021 y 2023, justo lo que durará la legislatura.
En la primera fase del plan, el Gobierno quiere cumplir con dos objetivos clave en este momento, que son "acelerar la recuperación" en el corto plazo y "transformar la economía" y el modelo productivo de España en el medio.
Así, según especificó el presidente del Gobierno en 'Wake up, Spain!', las 212 inversiones y reformas que pondrá en marcha su Ejecutivo en estos próximos meses tendrán un impacto en el crecimiento potencial de España que estará por encima de ese 2% a partir del año 2030.
Llegar a las pymes
Más allá del papel que jugarán las grandes empresas, para que este Plan cumpla con su objetivo debe conseguir llegar también a las pymes y las micropymes, que son las que componen el grueso del tejido productivo español.
En este marco, Calviño explicó que su Departamento ultima el lanzamiento de un Manifiesto de Interés para poner a disposición de las pequeñas empresas 3.000 millones de euros para impulsar su digitalización.
En este proyecto, la vicepresidenta señaló que el Gobierno quiere involucrar también a las grandes compañías para que ayuden a modernizar el tejido productivo. En concreto, mencionó al sector financiero, que en los últimos meses ha tendido su mano para participar en estos proyectos de transformación.
El calendario del Gobierno
'Wake up, Spain!' ha congregado al mundo económico, empresarial y político en una semana clave para el Plan de Recuperación, que analizará hoy, martes, la Comisión Delegada para la Recuperación y la Resiliencia de la Economía Española, el miércoles se explicará en el Congreso y en unas semanas se mandará a Bruselas.
El objetivo de Calviño es que España lo tenga aprobado ya en junio. Diferentes ministerios implicados en el diseño del Plan de Recuperación han estado intercambiando documentos con la Comisión Europea hasta hace menos de una semana.
Pedro Sánchez tiene prisa, y por eso incluyó en los Presupuestos de 2021 una primera parte de las ayudas europeas, antes incluso de que se aprobaran definitivamente. El presidente quiere convertir los 140.000 millones europeos en un estímulo inversor.
Acelerar el programa
Fuentes de Moncloa explican a este diario que, desde los primeros días a la vuelta de verano, sintieron el aliento de Bruselas. Y es que no era del todo cierto que los fondos de ayudas europeas aprobados en la "larguísima" cumbre del pasado mes de julio no incluyeran condiciones.
Es verdad que, en este caso, no obligan a políticas concretas -como los rescates de la anterior crisis-, pero la UE sí pide compromisos, ante este "gran salto de integración" que supuso mutualizar la deuda y encarrilar políticas transformadoras comunes.
Petición de Bruselas
La Comisión reclama que los fondos se inviertan en transformaciones económicas en consonancia con las grandes prioridades acordadas por los jefes de Estado y de Gobierno: la digitalización, la transición ecológica y la cohesión territorial y social.
Y el equipo de Sánchez en Moncloa, ante eso, se encoge de hombros, sonríe, y muestra su plan de gobierno. "En Bruselas no sólo nos apoyan, sino que nos felicitan por nuestras apuestas", explican las citadas fuentes. "Aplauden las políticas, e incluso las proponen como ejemplo a otros socios". Y ahora el presidente quiere ser, si no el primero, sí uno de los jefes de Gobierno que antes lleve el Plan aprobado a Ursula von der Leyen. Se prevé que entre el 20 y el 27 de abril.
En esa reunión, la presidenta de la Comisión se fijará especialmente en las reformas que proponga el equipo económico de Nadia Calviño en los tres aspectos más deficitarios de nuestra economía: la sostenibilidad del sistema de pensiones, la reforma del mercado laboral y la política fiscal. De ahí el acelerón que están dando tanto José Luis Escrivá como Yolanda Díaz y María Jesús Montero en estos campos.
El primero, presentó este lunes sus nuevas propuestas a la comisión del Pacto de Toledo; la segunda ya ha iniciado sus reuniones con los agentes sociales para modernizar el SEPE y simplificar los contratos de trabajo; y la ministra de Hacienda constituyó la comisión de expertos para la reforma fiscal que abordará el Ejecutivo ya en 2022.