Tras la Ley de Reducción de la Inflación (IRA) del presidente estadounidense Joe Biden, que recoge subvenciones masivas a la industria verde por valor de 370.000 millones de dólares, Europa tiene que mover ficha. Es la conclusión del consejero delegado de Endesa, José D. Bogas, durante su intervención en el Wake Up, Spain!, organizado por EL ESPAÑOL, Invertia y D+I en colaboración con EY, Oesía, Microsoft y EMT de Madrid.
"Es absolutamente básico para Europa desarrollar planes que incentiven fiscalmente, que reduzcan trabas administrativas y que faciliten que la inversión venga aquí", ha remarcado. Una cuestión que admite, es compleja: "En Europa 27 estados se tienen que poner de acuerdo y en Estados Unidos parece que hay más facilidad".
Todo en un contexto en el que se resiste a hacer predicciones sobre la evolución del gas. Tras los incrementos vistos durante el final de 2021 y la primera mitad de 2022 a consecuencia sobre todo de la guerra en Ucrania, la situación ahora es mejor debido a los 50.000 megavatios de nuevas renovables y también la reducción del consumo en Europa.
Pero habrá que esperar a ver "qué ocurre con China". También el próximo invierno. "Nos va a llevar a situaciones que, sin ser las mismas que hemos vivido, todavía nos tiene que poner en alerta por lo que pueda ocurrir", ha advertido.
Endesa por ahora sigue centrada en la descarbonización. Bogas ha repasado los dos concursos ganados por la compañía, uno en Portugal y otro en Andorra, España, en los que trabajan en la sustitución de la potencia termica de carbón por potencia de renovables.
Planes en los que también se está teniendo en cuenta el componente medioambiental y social. La idea es que el desarrollo renovable "pueda crear empleo y riqueza en la comunidad donde históricamente hemos estado con el carbón", ha incidido.
Para Bogas, iniciativas que van en línea con la reforma del mercado eléctrico, que entiende en realidad como una "evolución". Eso sí, ha dejado claro que es importante no confundir lo que son "medidas de emergencia temporales para contrarrestar una crisis con medidas estructurales del sector eléctrico".
"Las medidas intervencionistas no tienen cabida en una reforma estructural del mercado. Juegan su papel en las crisis, pero no puede ser la base", ha advertido.
Asimismo, se ha referido a las inversiones en movilidad, reconociendo que el proceso para contar con puntos de recarga para vehículos eléctricos es "lento". "Todos tenemos muy claro el objetivo al que nos dirigimos. Otra cuestion es el ritmo con el que lo hacemos", ha comentado.
La compañía cuenta actualmente con 14.000 puntos instalados, y su objetivo pasa por quintuplicarlos para 2025. "El problema es que desde el momento en que eliges una ubicación de un punto de recarga hasta que está operativo pasan años", ha señalado Bogas, que confía en que con el tiempo se vaya facilitando este desarrollo.
Bono térmico
Con respecto a la polémica suscitada en las últimas semanas con la concesión del bono térmico a familias numerosas sin contar con criterios de renta, el consejero delegado de Endesa, donde cuentan con 230.000 familias en esta situación, ha asegurado no ser "tan crítico".
"No hay que criticar lo que se ha hecho en el pasado, hay que mejorar", ha considerado.