Luis Gallego, CEO de IAG, espera que la compra de Air Europa “pueda salir adelante” pese a que reconoce que es un “proceso largo” que durará cerca de 18 meses. Así lo ha asegurado durante su intervención la jornada de inauguración del III Wake Up, Spain!, organizado por EL ESPAÑOL, Invertia y D+I en colaboración con EY, Oesia, Microsoft y EMT de Madrid.
De hecho, el CEO del holding de Iberia y de British Airways ha asegurado que ya han iniciado los trámites con las autoridades de competencia. La idea, como han repetido en varias ocasiones, es convertir España en un hub potente en Europa que pueda competir con los de París y Ámsterdam, además de potenciar la posición como puerta de entrada a latinoamérica.
El último acuerdo se selló la semana pasada e implica la adquisición por parte de IAG del 80% del capital de Air Europa en una operación valorada en 400 millones. Recordemos que el otro 20% ya lo tenía al convertir en agosto de 2022 un préstamo de 100 millones que otorgó a Globalia. En total, 500 millones.
Por otro lado, ha recordado lo que la compañía hace en materia de sostenibilidad. “Estamos haciendo cosas en el corto plazo como invertir en nuevos aviones”, ha dicho, a la vez que ha destacado que “los aviones de largo radio que incorporamos consumen menos combustible”.
Un segundo elemento es el combustible sostenible de aviación (SAF) pero “el problema es que su precio es elevado y no hay”, señala. Y ha ido más allá al asegurar que España podría liderar la producción de SAF. “Con el apoyo político adecuado podríamos construir 30 plantas de SAF en España en los próximos ocho años y ahorrar 7 millones de toneladas de CO2”, ha detallado.
Asimismo, desde IAG están trabajando en otros aspectos operacionales como un marco regulatorio que posibilite el cielo único europeo. No obstante, Gallego no es muy optimista en la puesta en marcha de este cielo único europeo, aunque destaca que “permitiría reducir el CO2 un 10%”.
Para 2023, el grupo aéreo espera volar al 98% de la capacidad que tenían previa a la Covid. Síntoma positivo de recuperación que podría verse afectado por una menor capacidad en Europa por la guerra y una alta demanda.
Todo ello en un escenario complicado tras la pandemia y con la inflación a la orden del día. A pesar de ello, desde IAG mantienen “el objetivo de volver a la rentabilidad previa a la Covid pero no es fácil por las presiones de costes que estamos teniendo (inflación, costes de combustible, etc.)”.