Y esto ha desatado la guerra por ofrecer los servicios a los clientes domésticos e industriales. "Como están los precios muy bajos, es el momento de que las comercializadoras de luz busquen ampliar cartera y dar una imagen de fortaleza", ha dicho a EL ESPAÑOL-Invertia Sandra Salinas, responsable del Departamento de Operaciones de Evolve Energía, una compañía eléctrica que ofrece suministro tanto a residenciales como a sector industrial.

"Después de una alta volatilidad, con precios disparados (se llegó a alcanzar en 2022 los 545 euros/MWh) y de haber tenido que enfrentarse a altos costes para cubrir las Garantías de Red Eléctrica para operar en el mercado, notas semanales altas, trámites los avales, ahora se puede trabajar con más desahogo", añade.

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Por eso, el mercado de la comercialización de luz vive una nueva época dorada. Las que han sobrevivido a los dos años de crisis energética se han embarcado en una guerra por la captación de nuevos clientes bajo el paraguas de un mercado mayorista que roza los cero euros el megavatio hora durante muchas horas al día. 

Y al menos mientras sople el viento, haya agua para las centrales hidroeléctricas y continúe el ritmo de crecimiento de la solar en España, el pool seguirá barato.

"Es curioso el precio de la luz ahora mismo no lo marca el gas sino las tormentas con mucho viento", explica a este diario Manuel Benedi, B2B Business Development Profesional de Energía y Sostenibilidad.

"En primavera y otoño nos convertimos en los más baratos de Europa. Luego ya, verano, entraremos en el montón, pero no en la segunda división que era como estábamos antes", apunta por su parte Francisco Valverde, experto en mercados eléctricos.

Ranking de comercializadoras

La guerra por hacerse con más mercado del suministro eléctrico también influye en las grandes compañías energéticas. Endesa es la primera comercializadora de luz y gas en España a cierre de 2023, seguida de Iberdrola. Después le sigue Naturgy, y en cuarta posición está Repsol.

La petrolera española está teniendo éxito en el negocio eléctrico gracias a sus ofertas multiproducto y la compra de grandes carteras de cartera de clientes. En la quinta posición está la francesa Total.

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"Cuando el Gobierno puso un tope al precio de la electricidad a 67 euros/MWh hace dos años, hizo mucho daño a las comercializadoras independientes, porque las grandes, al ser eléctricas verticalmente integradas, tenían generación propia que vendían directamente a sus comercializadoras, mientas que nosotras teníamos que ir al mercado mayorista", explican fuentes de una de las principales empresas de este sector. 

Pero ahora han conseguido ganar cuota de mercado en estos últimos meses también, a costa de las grandes, y "eso las preocupa". Pero "la realidad es que hemos vivido una anomalía de dos años". "El mercado vuelve a niveles en los que no hay tanta diferencia. Hay mucho cliente que se ha ido a las independientes otra vez", añaden.

Indexado o fijo

Con estos precios, hay que volverse a hacer la pregunta sobre qué tipo de contrato eléctrico es mejor. "Lo mejor es que si tienes un contrato a precio fijo que firmaste durante la crisis energética, aproveches las ofertas que están haciendo las comercializadoras porque te van a bajar el precio", explica a este diario Javier Colón, socio fundador de la consultora Neuro Energía.

"Ahora la mayoría de nuestros clientes están en el contrato indexado, no es interesante comprar energía a futuros", apunta Sandra Salinas de Evolve Energía.

Este negocio "sigue siendo rentable para las energéticas que tienen muchos clientes, porque no da un gran margen, aunque puedes hacer trading y dar otros servicios, y eso también son ingresos de una comercializadora", continúa.

"La comercialización eléctrica es un negocio recurrente. Es estable porque todo el mundo necesitar electricidad para su día a día. Y además, si ofreces autoconsumo, u otros servicios, como telefonía o combustibles para automoción, las posibilidades de que sea rentable se amplían. Lo ocurrido con la guerra rusa en Ucrania fue algo extraordinario", concluye Javier Colón.