El Gobierno de Reino Unido elimina este lunes las principales restricciones a sus ciudadanos que quieran viajar fuera del país y tengan la pauta completa de vacunación. Los turistas pueden desplazarse a los destinos de la lista ámbar, entre los que se encuentra España, sin tener que pasar una cuarentena de dos semanas a la vuelta, como ocurría hasta ahora.
La medida supondrá un espaldarazo a las principales zonas vacacionales de británicos, como las costa valenciana (especialmente la alicantina), en un momento crítico para la recuperación económica pero también por la emergencia sanitaria.
La Comunidad Valenciana lleva un mes incrementando su incidencia hasta superar el riesgo extremo, como ya ha ocurrido en la mayor parte del país. De momento el Gobierno valenciano mantiene en toque de queda 32 municipios de más de 5.000 habitantes que superan una incidencia a cumulada de 400, pero el problema está en que Sanidad reporta cada día entre 1.500 y 2.700 nuevos contagios.
Benidorm, por ejemplo, superaba este viernes los 300 casos por cada 100.000 habitantes, una cifra que "puede ser engañosa porque los datos se toman teniendo en cuenta la población empadronada, no la flotante", explica el presidente de la patronal de apartamentos turísticos, Miguel Ángel Sotillos (Aptur).
Los británicos llevan semanas reservando en España, pero los empresarios han notado una ralentización en el ritmo, con el miedo a que el Ejecutivo de Boris Johnson desplace a España al semáforo rojo y prohíba los viajes. Para destinos como Benidorm, los ingleses son aproximadamente el 40% del mercado, mientras que actualmente el 90% de los clientes son españoles.
"Hay mucho miedo y parece casi imposible salir del modelo de reservas de última hora", comenta un hotelero. De hecho, las previsiones para las próximas semanas "se tendrán que ver poco a poco" porque la incertidumbre sanitaria está lastrando la recuperación.
Desescalada en los vuelos
Lo cierto es que el interés creciente de los británicos por volver a la Costa Blanca se ha notado en el número de vuelos programados desde el aeropuerto de El Altet. La infraestructura ha ido recuperando el pulso del que es su principal mercado, pero también hacia otros países europeos con iniciativas como el pasaporte Covid.
En este sentido, los empresarios consideran que el uso de este documento tiene que extenderse también a Reino Unido, aunque en principio Johnson solo permitirá desplazarse a los ciudadanos inmunizados.
En cuanto al resto de mercados, la alta incidencia de España en el mapa europeo ha empezado a pasar factura en algunas reservas de franceses. El país galo recomendó no viajar al país, aunque no ha tomado por el momento medidas adicionales.