Dos años de cárcel y 19.000€ por desfigurar a un joven estrellándole una copa en la cara en un 'pub' de Dénia
La víctima se tropezó involuntariamente con el procesado. Se ha suspendido la pena con la condición de que no vuelva a delinquir.
11 noviembre, 2021 11:41Noticias relacionadas
Un joven de 22 años ha sido condenado por la Audiencia Provincial de Alicante a dos años de prisión por agredir a otro en una discoteca del municipio alicantino de Dénia, tras romperle una copa de cristal en el rostro.
El tribunal de la Sección Primera que enjuició los hechos le considera responsable de un delito de lesiones cualificadas, después de que, en el inicio de la vista, el procesado admitiese la agresión y se aviniese a un acuerdo de conformidad con la Fiscalía y la acusación particular, ejercida por la víctima.
El suceso objeto del proceso tuvo lugar en torno a las 4.30 horas del 25 de agosto de 2018, en una discoteca situada en la escollera norte del Puerto de Dénia, cuando el acusado contaba con 19 años.
En ese momento, el denunciante y víctima de la agresión tropezó involuntariamente con el acusado, a quien no conocía con antelación, según recoge la relación de hechos probados.
El tropiezo provocó que el procesado reaccionase de forma agresiva hasta el punto de estampar "violentamente la copa grande de cristal que llevaba en la mano contra la cara del perjudicado" con el único fin de "menoscabar gravemente su integridad física", según la sentencia.
El impacto ocasionó heridas de diversa consideración en el rostro de la víctima por las que requirió asistencia facultativa y tratamiento quirúrgico posterior con el objetivo de reconstruirle el rostro y tratar de que no quedasen cicatrices.
Dos meses con las heridas
El tribunal concreta que las lesiones tardaron en estabilizar 70 días, quince de los cuales el perjudicado estuvo incapacitado para "el desempeño de sus ocupaciones habituales" debido a las heridas que presentaba y al tratamiento al que estaba siendo sometido, tanto médico como de reconstrucción.
Además, incide en que, como resultado de esas heridas, la víctima sufre como secuela "un perjuicio estético medio derivado de cicatrices especialmente visibles en la zona facial", algo que le acompañará el resto de su vida.
Tras el reconocimiento de los hechos por parte del acusado, la Audiencia Provincial de Alicante acuerda la imposición de la pena pactada de dos años de cárcel, al aplicar la atenuante de reparación del daño, dado que el acusado ya había indemnizado a la víctima con el pago de 19.000 euros.
Asimismo, el tribunal accede a suspender la ejecución de la pena de ingreso en prisión por un plazo de tres años con la condición de que el condenado no vuelva a delinquir en ese periodo.