Ya ha pasado más de un mes de la petición de expulsión de los concejales de Cs de Orihuela que firmaron una moción de censura contra su entonces socio de Gobierno, el PP de Emilio Bascuñana, y nada se sabe de los expedientes. La moción se ejecutó el 25 de abril, dando el Gobierno local a los socialistas.
Los cinco concejales liberales liderados por José Francisco Aix se fueron, junto a los concejales del PSOE local y Cambiemos (Podemos), el pasado 6 de abril a un notario para registrar una moción de censura cuando todavía eran parte del Gobierno municipal junto al PP.
Aquella conducta les valió la expulsión, a las escasas horas, del equipo de Gobierno municipal. Y en ese mismo momento se puso en marcha la maquinaria interna de Ciudadanos en la provincia y la Comunidad pidiendo que se les expedientase y se les expulsase. Ya que como admitió el entonces coordinador autonómico del área Institucional, Jesús Gimeno, lo habían hecho "sin permiso del partido".
La inacción del partido de Inés Arrimadas desde Madrid provocó la dimisión de Gimeno y del coordinador autonómico de Programas, Vicente Tent. Según explicaron entonces a EL ESPAÑOL, por las discrepancias sobre las medidas disciplinarias a aplicar a los cinco concejales en Orihuela.
Desde la dirección nacional del partido liberal explicaron a este diario que la inminencia de la moción de censura, que finalmente se produjo el 25 de abril, impidió a que los órganos del partido tomasen una decisión antes de que se consumasen los hechos.
"Lo mínimo son dos o tres días para que desde 'Régimen Disciplinario' adopten una decisión, y encima está el fin de semana entremedias", señalaron fuentes de Organización. Y después, "hayan alegado o no, todos los afiliados tienen derecho a recurrir a la Comisión de Garantías esa decisión", añadieron.
Otros casos
Ese mismo día el comité provincial del partido en Alicante que dirige el diputado provincial Javier Gutiérrez ya mostró su indignación por la inacción de Madrid y abrió su propio expediente a los cinco concejales.
Ahora, ha pasado un mes y no se sabe nada del asunto. Por eso, día a día crece el malestar entre dirigentes y afiliados del partido en la provincia que recuerdan lo rápido que desde Madrid se procedió a expulsar a los concejales de Cs de Teulada que firmaron una moción de censura con el PP. "Fue inmediato", afirman fuentes de la provincial de Cs. "Esto es un claro agravio comparativo", afirmó ayer un cargo del partido en la provincia.
También recuerdan cómo el partido se "deshizo" del portavoz de Cs de Elche, Eduardo García Ontiveros, que se vio obligado a llevar su caso a los juzgados, que finalmente dieron la razón al partido.
Por eso, desde Cs de Alicante justifican esta inacción en las maniobras del diputado nacional oriolano, Juan Ignacio López-Bas, para que no se expediente a sus compañeros de agrupación, con quienes tiene un pasado común. Y recuerdan la relación de éste con el pasado político de CL y CLR Orihuela y el empresario José Alcántara, al que se considera el instigador de la moción de censura en alianza con los socialistas que tanto les han criticado.
"En la actual situación de Cs, cada día perdiendo votos y afiliados, este tipo de actuaciones sólo consiguen que la gente se desilusione con el proyecto. Ahora esperamos los resultados de las andaluzas para asistir a una desbandada general", reconoció ayer un reconocido dirigente de Cs a este diario. Y no es el único que se manifiesta en estos términos.
De hecho, en la manifestación del pasado martes en defensa del trasvase Tajo-Segura, los afiliados y dirigentes no sabían si dejarse fotografiar con Aix y los suyos, quienes acudieron a la protesta haciendo piña con el PSOE mientras que el partido tiene una alianza estratégica con el PP en la capital y la Diputación.